La última victoria en Balaídos del Valladolid al Celta en Primera, del siglo pasado
El Real Valladolid, que el próximo domingo visita al Celta de Vigo en Balaídos, no gana al conjunto celeste a domicilio como equipo de Primera División desde hace 26 años, en un partido de gran recuerdo para los aficionados blanquivioletas porque selló su última clasificación para la ahora extinta Copa de la UEFA. Para el duelo de este domingo, con dos equipos buscando salir de la zona baja de la clasificación, el Real Valladolid no podrá contar con Masip, que detuvo a Iago Aspas dos penaltis en la primera vuelta.
Aquel 4 de enero de 1997, el conjunto pucelano, dirigido entonces por el argentino Vicente Cantatore, derrotó al Celta con goles de Lozano, de penalti, y Quevedo. Las otras dos victorias en Primera del Real Valladolid en Vigo fueron en la campaña 1950/51 y en la 1993/94.
En Balaídos, ambos equipos se enfrentaron 31 veces y el balance es claramente favorable al equipo vigués. No obstante, los últimos tres enfrentamientos acabaron en tablas.
La temporada 2020/-21, la última vez que se midieron en el municipal olívico, Celta y Valladolid empataron a un tanto. El exceleste Fabián Orellana adelantó a los vallisoletanos en el minuto 70 pero el central colombiano Jeison Murillo igualó en el descuento.
La temporada anterior, el 29 de noviembre de 2019, ambos equipos empataron sin goles en Balaídos, donde un año antes habían protagonizado un festival de goles (3-3) en su reencuentro en la máxima categoría tras el ascenso del Pucela.
La primera vuelta, una pesadilla para el Celta y Aspas
Este encuentro, que se disputará este domingo a las 16.15 horas, es fundamental para ambos equipos. Los dos conjuntos buscan alejarse de la zona de descenso que ocupan Elche, Valencia y Cádiz. Celta y Valladolid está dos puntos por encima del conjunto gaditano.
En el partido de la primera vuelta los de Pacheta golearon al Celta con un contundente 4-1 en uno de los peores partidos del ya cesado Eduardo Coudet. En ese partido Aspas vio como Masip le detenía un penalti, por dos veces, a Iago Aspas.