Las primeras horas de Rafa Benítez en el Celta: de las cuestas de Vigo a sus primeras fotos con la afición

Rafa Benítez es la gran apuesta del Celta de Vigo para su banquillo en la temporada del Centenario. El técnico madrileño llegó a la ciudad el pasado lunes desde Portugal, donde aterrizó procedente de Inglaterra. Sus primeras horas, recogidas por las cámaras del club, fueron frenéticas. Rafa Benítez conoció las instalaciones del club, tanto A Sede como la Ciudad Deportiva Afouteza, fue presentado y dirigió su primer entrenamiento a las 19.00 horas. No dudó en bromear sobre las cuestas de la ciudad mientras recordaba los orígenes ourensanos de su mujer, cuya familia veranea en Vigo y Baiona.

El técnico llegó a primera hora de la mañana a A Sede acompañado de Juan Carlos Calero. Carlos Mouriño, presidente del club, y su hija Marián, recibieron al entrenador. Rafa Benítez fue visitando las distintas secciones del club. Desde la secretaría técnica al área de márquetin. También estuvo en el restaurante Silabario, en el ático de A Sede.

Tras su presentación, en la que desgranó parte de su proyecto ante los medios de comunicación, bajó a la calle. Allí le esperaban un buen número de aficionados para hacerse fotos. Entre ellos se encontraban Lucas Peteiro y Marcos Piedras, dos de los integrantes del podcast TQHT. Ambos protagonizaron la Operación Jaula, durante una semana esperaron la llegada de Rafa Benítez al club. El técnico posó con una camiseta con su nombre y el dorsal 14. Un número que desde TQHT explican que tiene que ver con el título que el entrenador logrará con el Celta para redondear un historial que tiene ya 13 trofeos.

Por la tarde se desplazó a la Ciudad Deportiva Afouteza. Allí conoció a los trabajadores del club, a los jugadores y al cuerpo técnico que colaborará con él esta temporada. Se trata de Borja Oubiña, Nando Villa y Álex Andújar. Charló con Marchesín, que se sigue recuperando de la rotura en el tendón de Aquiles y con su recuperador, que quiere que el argentino se lo tome con más tranquilidad para no arriesgarse a una recaída. Su primer día de celeste terminó con la primera sesión de trabajo sobre el césped de Afouteza antes de pasar la noche en un hotel de la ciudad.