Antón Álvarez, C. Tangana, compositor del Himno del Centenario del Celta de Vigo, está emocionado con haber tenido la oportunidad de firmar 'Oliveira dos cen anos', pieza emotiva y coral que bebe del folclore gallego y con la que 'El Madrileño' se siente más unido si cabe a su equipo de siempre.
"Esto me ha unido un poco más", ha contado en una entrevista con EFE con motivo del estreno. Para él, ha sido un proyecto "emocional", pues se trata de su club "de toda la vida", ese que su padre, que "siempre ha sido muy gallego", le mostró en Balaídos.
Para C. Tangana esta es por tanto una oportunidad inmejorable de honrar a su "viejo", a su tierra, a su cultura, esa que admira, respeta, quiere y cuida Antón Álvarez, en sus propias palabras. Antón Álvarez senior se fue de su comunidad autónoma para Madrid, pero "siempre ha sido muy gallego", explica su descendiente, "como quien dice, nacionalista, incluso". Y, como todo lo que le ha ido transmitiendo es para él muy ilustrativo, "traerle yo al club de esta forma ha sido muy bonito".
En el himno, presentado en Afundación, participan distintos símbolos de la cultura viguesa como la emblemática Coral Casablanca, el grupo de pandereteiras As Lagharteiras y la popular peña celtista Tropas de Breogán, además de la banda Keltoi.
C. Tangana, para hacer frente a la tamaña hazaña que en él ha recaído, ha querido escribir sobre el "sentimiento celtista", el que lleva en el corazón. No olvida lo vivido el pasado junio cuando el equipo gallego certificó su permanencia con un agónico triunfo ante el campeón de Liga. "La salvación fue muy importante", dice hoy Antón Álvarez (Madrid, 1990) con alivio.
El videoclip dirigido por el rapero que nació en la capital española y se crio en Carabanchel es para "el club, la ciudad y el celtismo". "Creativamente nunca he sido tan ambicioso", confiesa acerca de su producción "más complicada".
Y si alguien pensó "quién es este 'ghicho' que viene aquí de Madrid", cuenta que para él el celtismo es un acto de militancia y, la suya, no se puede cuestionar. Como prueba, afirma rotundo que del fichaje del técnico Rafa Benítez, quien sustituye en el banquillo de Balaídos al portugués Carlos Carvalhal, se hubiese alegrado igual. "Me iba a alegrar de lo de Rafa, hiciera el himno o no", bromea.