La desgracia se ceba con el Celta Fortuna: cae en su estreno con dos polémicos penaltis

Sería sencillo hacer un chiste con el nuevo nombre del filial vigués, el Celta Fortuna, y lo que sucedió en el estreno liguero de los de Claudio Giráldez. Un cúmulo de desgracias que culminaron en una injusta derrota para los celestes, que fue superior desde el pitido inicial al final. Pero dos penaltis por mano de Javi Domínguez en solo tres minutos, el 18' y 21', pusieron un asombroso 2-0 que nadie en el Toralín podía presagiar. Después, avalancha de juego y ocasiones de los de Claudio Giráldez que se tradujeron en una sola diana para recortar mediado el segundo periodo. Dos penas máximas más que polémicas señalados por Pérez Hernández tumbaron a los olívicos en su estreno.

A los diez minutos la tuvo el Celta B en una contra llevada por Alfon desde el costado, con pase raso al centro del área donde el remate final de Raúl Blanco lo acababa despejando el meta berciano Andrés Prieto con apuros. Al paso por el cuarto de hora lo volvía a intentar el Celta Fortuna en un zapatazo potente de Alfon González, el 'veterano' del equipo con sus 24 años, se iba fuera por poco. Mandaba el filial olívico en un gran inicio de partido, muy dinámico y divertido. La Deportiva también quería asomarse a las inmediaciones de la meta defendida por Coke Carrillo.

Hasta que a los 17 minutos, en un córner para la Ponferradina botado por Ale Díez, el intento de chilena de Brais parece estrellarse en el brazo despegado de Javi Domínguez. El colegiado indicaba penalti ante la incredulidad de los vigueses, pero el disparo de Pol Llonch se colaba aunque Coke Carrillo lo tuvo cerca en su estirada.

Y a los dos minutos, el esperpento estaba servido cuando Carrique, hasta la temporada pasada jugador del Celta Fortuna, entraba por la banda y su centro chut volvía a topar en Javi Domínguez, señalando el colegiado el segundo penalti en dos minutos por manos de su central. Ale Díez lo estampaba en la misma escuadra ubicando el dos a cero.

Remar contracorriente

Tocaba remar contra un decorado terrible, dos penas máximas en un parpadeo cuando el equipo de Giráldez había arrancado muy bien. Lo intentaba Alfon habilitando a Hugo en un fenomenal servicio pero que el extremo vigués no pudo culminar bien.

Raúl Blanco la tuvo recogiendo un rechace en el punto de penalti, pero su chut a bocajarro lo sacaba Andrés en un paradón si bien el colegiado alzaba el brazo, fuera de juego. Y es que el Celta Fortuna percutía con ganas y calidad. Una delicatessen de Pablo Durán en la línea de fondo acababa sin suerte para los célticos, que seguían luchando contra un marcador a todas luces injusto.

Gol anulado por un dudoso fuera de juego

A los tres minutos del segundo periodo, la primera ocasión del filial acababa en el fondo de las mallas pero esta vez el asistente levantaba la bandera. Muy dudosa la jugada en un pase en profundidad de Alfon que remataba de primeras Raúl Blanco en escorzo al fondo de la red batiendo por alto a Andrés. Quejas celestes que de poco sirvieron.

La Ponferradina navegaba con el viento de popa gracias al marcador, administrando su ventaja cómoda con la veteranía de jugadores. Hasta que mediado el segundo periodo, una sensacional jugada personal de Hugo Álvarez entrando por el perfil izquierdo del ataque de los gallegos, casi hasta línea de fondo en un endiablado eslálom, acababa en pase raso de la muerte sobre la carrera de Raúl Blanco, quien empalmaba de primeras un trallazo que recortaba las diferencias en El Toralín.

El equipo de Claudio Giráldez seguía siendo el dueño de la zona medular y de la mayor parte de la posesión del esférico. Pero la defensa de la Deportiva estaba muy bien situada y no perdía la concentración ante las avalanchas de un Fortuna que cerraba con tres jugadores. En una de las llegadas del filial, Tincho recortaba en el área y caía al suelo, pero el colegiado lo que le indicaba era falta y amarilla por simular. Viendo cómo se fue de la jugada el jugador visitante parece que Pérez Hernández esta vez sí que acertó.

El veteranísimo Yuri, recibido por la grada blanquiazul como ya se pueden ustedes imaginar, forzaba un saque de esquina en una de las poquísimas aproximaciones del equipo de Íñigo Vélez de Mendízábal durante el segundo periodo. Brais tiró muy desviado en la jugada.

Y a los 89, la enésima para Alfon González entrando por el perfil derecho, con trallazo potente que buscaba la escuadra pero encontró a la manopla del meta de la Ponferradina, un Andrés Prieto al que la delantera del Celta Fortuna estaba sinceramente convirtiendo en internacional. Una actuación sensacional la del meta local. Javi Rueda puso en el añadido el último centro peligroso que se acababa perdiendo por la línea de fondo. Al final, una derrota injusta pero dando una imagen sensacional.