La llegada de Claudio Giráldez al entrenador del primer equipo ha supuesto un soplo de aire fresco para el Celta de Vigo. El técnico porriñés, junto a su cuerpo técnico, han devuelto la ilusión al celtismo con un estreno notable en el Sánchez-Pizjuán. La victoria ante el Sevilla FC llegó a través de un fútbol alegre, de posesión y ofensivo. Las diferencias con el estilo que implantó su predecesor, Rafa Benítez, son abismales. La plantilla lo ha agradecido y aprovechando el parón de selecciones han decidido pasar una jornada de confraternización este jueves.
Jugadores y cuerpo técnico, algo que no era habitual con Rafa Benítez y sus ayudantes, comieron todos juntos este jueves en A Ramallosa. El lugar elegido fue La Molinera. Allí estuvieron futbolistas, entrenador y ayudantes en una comida de confraternización.
Tal como pudo saber ElDesmarque, el ambiente fue inmejorables. Las bromas y risas entre la plantilla y el cuerpo técnico fueron constantes. La llegada de Claudio Giráldez ha sido avalada por toda la plantilla. Su estilo de juego gusta en el vestuario.
Así lo demuestran las palabras de Iago Aspas en el túnel de vestuarios del Sánchez-Pizjuán: "¡Queremos la bola y sabemos jugar!". Al terminar el encuentro Hugo Sotelo señaló que con el estilo de juego propuesto por Claudio Giráldez: "Creo que por la plantilla que tenemos nos sentimos más a gusto".
Este jueves, antes de la comida entre jugadores y cuerpo técnico celebrada en A Ramallosa, Fran Beltrán reconoció que con Rafa Benítez había situaciones básicas de juego que no se entrenaban: "Claudio lo que nos está diciendo es que intentemos bascular, que si uno sube otro baje, que si el balón está en un lado uno tiene que estar para darle la vuelta. Son conceptos que no son nuevos para nosotros pero hacía mucho que no trabajábamos".
El buen ambiente reinante permite al club tener confianza en que Claudio Giráldez y su cuerpo técnico sean capaces de sacar adelante al equipo y cerrar la salvación. Por delante queda también sentarse a negociar la renovación del contrato del porriñés, que termina este próximo 30 de junio. Claudio Giráldez aseguró que no tiene prisa por sentarse a negociar: "Yo quiero estar aquí el año que viene, el mayor tiempo posible. El club sabe que es mi prioridad" pero "no es el momento de pensar en Claudio ni su futuro".