Sergio Carreira siente por fin el calor del celtismo: "La última vez que jugué fue sin gente"

Sergio Carreira ha vuelto a jugar un partido de Liga con el Celta de Vigo casi cuatro años después de sus primeros duelos de la mano de Óscar García Junyent. Muchas cosas han cambiado desde esos meses con los estadios vacíos por la epidemia provocada por el coronavirus a este viernes 23 de agosto. Con Balaídos completamente abarrotado el vigués pudo sentir el calor de la afición en su primer partido de Liga enfundado en la elástica celeste con las gradas repletas de gente gracias a la confianza que Claudio Giráldez ha depositado en el vigués.

El canterano reconoció que el Celta arrancó el partido "de forma poco positiva" al encajar un gol, obra de Diego López,  en una mala acción defensiva. "Tenemos que mejorar eso pero hemos vuelto a remontar otra vez, y por momentos, con un nivel de juego excelente", destacó el lateral.

Sergio Carreira se mostró feliz por la apuesta que está haciendo Claudio Giráldez por la cantera. Ante el Valencia llegaron a jugar ocho canteranos: "Es el reflejo de lo que se está haciendo en los últimos años y también de esa confianza que Claudio deposita en nosotros".

El defensa se mostró "muy contento de que estemos todos juntos para sacar adelante los tres puntos". Recordó que "la última vez que jugué" un partido de Liga con el Celta en Balaídos "fue desgraciadamente sin gente" ya que el coronavirus había obligado a parar la competición y todo el país.

Este viernes "fue mi primer partido, noté el calor de la gente". "Los fuegos, la afición y todo lo que envolvió al partido fue excelente", confesó. Cree Sergio Carreira que ese buen ambiente "fue uno de los motivos por los que pudimos remontar".