El Barça volvió a tropezar en LaLiga EA Sports perdiendo la ventaja de dos goles que tenía ante el Celta. Un partido con mucha tensión, con Marc Casadó expulsado y con alguna decisión del colegiado que ha generado una gran polémica. Una de ellas tuvo que ver con Iago Aspas, que terminó viendo la amarilla después de protestar una acción.
Una de las novedades de Hansi Flick en su alineación fue la de Gerard Martín. El lateral partió de inicio y vio tarjeta amarilla en el minuto tres de juego. Una tarjeta que le condicionó toda la primera mitad y por la que pudo ser expulsado en otra acción del encuentro.
"Me pisaste... ¡Me pisaste!"
El enfado de Iago Aspas. 😡#DeportePlus #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/fBPD0G3fea
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) November 23, 2024
Ya en el minuto 43, Gerard Martín protagonizó otra jugada que le pudo costar su expulsión. El defensor del Barcelona arrolló a Iago Aspas con una dura entrada que para el colegiado no merecía la segunda tarjeta amarilla. Los jugadores del Celta no dudaron en protestar pero, sin duda, el capitán del equipo fue el que más alterado se mostró, explotando por la decisión del colegiado.
Soto Grado no lo dudó y, en vez de expulsar a Gerard Martín, sacó la tarjeta amarilla a Iago Aspas. Ya en el descanso y mientras los jugadores se marchaban al túnel de vestuarios de Balaídos, el delantero gallego recriminó la acción al joven futbolistas del Barça.
🗣️ "Me pisaste. Él lo vio y te va a cambiar"
🗣️ "Pero es una faltita"
La conversación entre Iago Aspas y Gerard Martín en el Celta-Barça#ElPost pic.twitter.com/9mYV6PeTk9
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Las cámaras de DAZN captaron la secuencia al completo y cómo Iago Aspas pide explicaciones a Gerard. "Me pisaste, él lo vio y te va a cambiar", decía el delantero del Celta en referencia a Hansi Flick, que tomó la decisión de sentar a Martín para sacar a Héctor Fort.
"Pero es una faltita", le respondía Gerard Martín, que no entendía el cabreo de Iago Aspas. Tanta era la tensión que jugadores como Douvikas o Borja Iglesias tuvieron que separar al delantero, llevándoselo al túnel de vestuarios para que la cosa no fuera a mayores.