El Real Madrid se llevó la locura del Etihad Stadium. Un partido en el que todo estaba en su contra de principio a fin pero que terminó sacando su gen ganador en la Champions para ganar en una tanda de penaltis en que eliminaron al Manchester City de Pep Guardiola en una tanda de penaltis de pura emoción hasta el final.
En la primera parte el Manchester City fue un completo asedio a la portería de Lunin. Desde el primer minuto fueron dueños del balón y se instalaron los diez jugadores de Guardiola en el campo merengue. Sin embargo el Madrid no se arrugó y se atrevió esperando atrás para salir al contragolpe, ADN merengue. Y así fue cuando llegó la jugada clave de la primera mitad.
Un despeje de Carvajal al cielo del centro del campo terminó en una pinchada espectacular de Jude Bellingham, que se dio la media vuelta para devolverle el balón al lateral para dársela a Vinicius dentro del área y, con mirar lo justo, le bastó para meter un balón a Rodrygo que falló al primer toque ante Ederson pero no falló en el rebote para meterla dentro de la portería. 1-0 en la primera ocasión de peligro que tuvo el equipo de Ancelotti.
El City no se arrugó ni se dejó intimidar con la eliminatoria en contra y siguieron jugando en zona de tres cuartos ante la impotencia de Kroos, Camavinga y Valverde de no poder llevarse ningún balón dividido, y las peligros no pararon de llegar desde entonces.
Haaland avisó con un cabezazo al larguero que Bernardo Silva no pudo aprovechar tras llegarle el rebote completamente solo, un aviso que encerró aún más a los merengues, totalmente hundidos en el área. Kevin de Bruyne, ausente en la ida, no paró de intentarlo con disparos de media distancia que hicieron sacar buenas estiradas al ucraniano, que sentía cómo las balones le llovían. Incluso desde los córner se atrevía el belga para hacer un gol olímpico que hubiese entrado si Lunin no la hubiese tocado con la yema de los dedos.
Rüdiger en esta ocasión no estaba emparejado a Haaland y aún así demostró que es más que una sombra del noruego. Sacó con la bota un disparo peligrosísimo de Jack Grealish en una contra letal con Carvajal fuera de marca. El City las tuvo de todos los colores pero el Madrid tuvo la mentalidad para aguantar la tormenta en la primera mitad.
Con el paso del tiempo los de Manchester no se precipitaron y fue la entrada de Doku lo que necesitaba Guardiola para meter chispa al partido. Un regate el línea de fondo sirvió para sacar un disparo que Rüdiger sacó pero el balón le quedó muerto a De Bruyne para fusilar al fondo de la red cuando quedaba tan solo un cuarto de hora para el minuto 90. El belga también tuvo sus botas marcar el segundo lanzando un balón por encima de larguero cuando tenía toda la portería para él.
El partido se fue a la prórroga y el guion no cambió con un Vinicius que tuvo que salir sustituido después de una última carrera en la que le volvió a superar Kyle Walker pero en la última de los primeros 15 minutos la tuvieron con un centro a media altura de Brahim que cazó Rüdiger pero no la empaló bien y se marchó desviado arriba.
En la tanda de penaltis Modric falló pero Lunin se vistió de héroe parando a Bernardo Silva y Kovacic. Nacho y Rüdiger sembraron la locura y el Real Madrid elimina al Campeón de Europa para encontrarse contra el Bayer de Múnich en semis.