Hablar de Albert Riera no es hablar de un cualquiera. El que fuese jugador de LALIGA, pasando por clubes como el Mallorca -donde se formó-, el Espanyol o reconocidos extranjeros tales como el Liverpool, se encuentra actualmente entrenando al Celje, próximo rival del Real Betis en la Conference League. Sin embargo, si ver a un español en la liga eslovena podría resultar curioso -no es el único, el pasado fin de semana perdió ante el Olimpija de Víctor Sánchez del Amo-, conocer la historia del experico en Eslovenia sí tiene mucha miga.
Su carrera como entrenador, puramente, ya que antes pasó como asistente en el Galatasaray, arrancó en la 2022/23 con el Olimpija -donde vivió una serie de capítulos desagradables, como ser expulsado por los ultras en su presentación- equipo ahora entrenado por Víctor Sánchez del Amo.
En su primera aventura en Eslovenia, Riera acumuló 29 victorias y seis empates en 45 encuentros, finalizando la temporada como campeón de liga y campeón de la Copa de dicho país. Una auténtica pasada.
Su excelente rendimiento le llevó a ser objetivo prioritario del Celje, subcampeón aquel año, donde consiguió 9 victorias y dos empates en 12 encuentros ligueros. Además, clasificó a los eslovenos, por primera vez en su historia, a la fase de grupos de la Conference League, escribiendo historia una vez más.
Entonces apareció el Burdeos. El primer equipo donde jugó fuera de España, club en el que le guardan un enorme cariño y que, además, le permitía competir en la Ligue 2 francesa. Un salto considerable. Sus números en Francia tampoco fueron nada malos y sumó 14 victorias y seis empates en 32 partidos. Todo iba bien, hasta que el club galo acabó desapareciendo -tal y como le conocíamos hasta ahora- y liberando su contrato.
Los contratos profesionales quedaron disueltos y Albert Riera, que venía de triunfar en Eslovenia y de dejar 12º clasificado al Burdeos, se quedaba en paro. Todo iba a dar un giro totalmente inesperado.
El Celje, su exequipo en Eslovenia, arrancó el año de la mano de Damir Krznar, técnico que superó la primera ronda previa de la Champions League ante el FC Flora (7-1), ganó la primera jornada en su liga y, por si fuese poco, sacó un empate ante el Slovan Bratislava en la ida de la segunda ronda previa en la Champions (1-1), pero tras conocer la situación de Riera lo apostó todo por el español.
Despidió a su entrenador, que tenía grandes números, recuperó a Riera y lo presentó como a una estrella. Lo realmente duro fue su primer resultado: cayó eliminado en la segunda ronda previa de la Champions tras un contundente 5-0.
Por si fuese poco, perdió en su redebut en la liga (1-0) y, posteriormente, caería en la previa de la Europa League en la prórroga. Su primer gran resultado llegó en la última ronda previa a la Conference League, donde ganó 4-1 al Pyunik Yerevan (llegaba tras perder en la previa) y, desde entonces, ha reenganchado al equipo.
Actualmente se encuentra cuarto clasificado a siete puntos del líder, el Olimpija de Víctor Sánchez del Amo, aunque en Eslovenia todos esperan que vaya sumando de tres y acabe peleando por el título. En Europa tampoco desentona: perdió ante el Guimaraes en la primera jornada, pero consiguió vencer al Basaksehir turco 5-1, firmando una de las grandes sorpresas de la jornada. El Benito Villamarín será su próximo desafío.
Esta historia, todo sea dicho, no será ninguna sorpresa para los oyentes del Morning dirigido por Axel Torres, conocido periodista español, pero posiblemente despierte el interés de muchos otros no-seguidores que, a buen seguro, mirarán con atención el trabajo de Albert Riera a partir de ahora.