El Deportivo afrontaba el choque contra el Villarreal pendiente de lo que al mismo tiempo sucedía en Éibar, donde la afición coruñesa tenía puesto al menos uno de sus ojos tras sentirse defraudada por la incapacidad de los hombres de Pepe Mel en las últimas jornadas. Allí el Sporting de Gijón se jugaba seguir presionando al conjunto blanquiazul o certificar su descenso a la Segunda División salvando de paso al equipo coruñés. Los asturianos hicieron los deberes pero el punto del Dépor unido al empate del Leganés salva matemáticamente al cuadro blanquiazul.
El Deportivo arrancó el encuentro en el Estadio de La Cerámica con la intención de asociarse en tres cuartos, ser protagonistas y defender lejos del área, pero la falta de precisión en las combinaciones impidió una mayor presencia en campo rival. Andone intentó estirar al Dépor con sus desmarques de ruptura pero no salió victorioso en sus duelos individuales contra los centrales amarillos y el equipo se resintió de ello. Ola John lo intentó por el perfil izquierdo, encarando a Mario con regularidad y buscando el disparo de media distancia, aunque sus arrancadas tampoco tuvieron premio.
Sin la pelota, el cuadro herculino buscó cerrar espacios interiores con la intención de minimizar hasta el extremo la conexión de Bruno y Trigueros con Soldado y Bakambu. Los de Escribá acosaron a Juanfran por el carril izquierdo, conscientes de que el lateral del Dépor no pasa por su mejor momento cuando es exigido en el uno contra uno. Poco a poco, a través de centros laterales al corazón del área, el submarino amarillo llevó el encuentro a su terreno, y el Deportivo comenzó a tener problemas para hilar tres o cuatro pases seguidos sin sentirse acosado.
Al descanso se llegaría con tablas en el marcador y una acción polémica: Germán Lux y Roberto Soldado se vieron envueltos en una riña en la que el portero argentino empujó al punta local tras sentirse agredido por el ex del Tottenham. Gil Manzano saldó el conflicto con una cartulina amarilla para ambos que impedirá al guardameta titular del Deportivo formar parte de la convocatoria herculina para medirse a Las Palmas en la jornada 38.
En el segundo tiempo el Villarreal subió una marcha y el Dépor se resintió. Sin capacidad para retener la pelota, el equipo se encomendó a la resistencia: líneas juntas, poderío de la pareja de los centrales cerca del área y balones en largo a Andone para que el rumano hiciese la guerra por su cuenta.
Intentando profundizar en el planteamiento defensivo de la segunda mitad, Fajr saltó al verde en el lugar de Ola John. El internacional marroquí se colocó en banda izquierda proporcionando mayor sacrificio sin la pelota y dando un plus a balón parado, lo que demandaba el partido con media hora por jugar.
En una recta final de máximo sufrimiento en la que Bakambu disfrutó de una ocasión clara en boca de gol para anotar el 1-0, el Dépor consiguió la salvación de matemática tras hacer un esfuerzo extraordinario sin la pelota. El empate del Leganés en San Mamés salva al Deportivo, pese a que el Sporting (1-1) hizo los deberes en Éibar (0-1).
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