El área de fútbol base del Real Club Deportivo tiene un as bajo la manga. El convenio de colaboración con el San Tirso parece el paso puente perfecto para engrasar la cadena de formación de las categorías inferiores. El club del concello de Abegondo está dispuesto a ceder ante las pretensiones del equipo capinaeado por Albert Gil, creándose una especie de filial en la sombra.
El hecho de que ambos clubes coincidan en Liga Gallega Infantli impide firmar un convenio de filialidad, pero con el ascenso de su primer equipo a Preferente Galicia, el plan está claro. El San Tirso jugará en su campo y conservará su escudo, pero el Deportivo pondrá la estructura técnica necesaria. Los equipos de base serán los pasos puente entre los Deportivo A y B, tal que los jugadores de primer año con más progresión jugarán en el San Tirso, los de menos en el Deportivo B y los de más progresión de segundo año en el Deportivo A.
Otra cosa diferente es en aficionados. Ahí, la no posibilidad de firmar dependencia o filialidad impide que los jugadores que jueguen en Preferente puedan hacerlo ocasionalmente en el Fabril. En este sentido, el club ha intentado un acercamiento con el Silva SD, el segundo club de la ciudad y que compite en Tercera División. En la entidad que preside Luis Varela ven con buenos ojos seguir con la política de cesiones, pero no perder su autonomía o condicionar su futuro deportivo.
Esta relación no ha sido vista con buenos ojos por parte de los otros clubes de As Mariñas, que entienden que no se produce una competición en las mismas condiciones. De hecho, instituciones como el Once Caballeros no acudieron al torneo de base del Deportivo en protesta por esta circunstancia.