El entrenador del Deportivo, Pepe Mel, confía en su plantilla y no cree que le estén haciendo la cama. En su opinión, que el equipo juegue bien o mal no depende de cuánto afecto le tengan sus jugadores, sino de cómo jueguen ellos y los resultados que se obtengan de su esfuerzo. Aun así, recalca su buena relación con sus futbolistas.
"Aunque jueguen tu hijos, cuando el árbitro pita, el que está fuera pinta poco. Yo pongo a los que considero que tengo que poner, a los que creo que pueden competir mejor, y no a quién me quiere a mí más, porque si no me voy a confundir. Sinceramente, en lo que pienso es en el Getafe, en hacer las cosas bien, que los jugadores hagan lo que sepan hacer, que lo intenten... Esto es un juego y cuando en un juego el que mueve los mandos de uno de los dos equipos, no consigue resultados buenos, tiene un problema", explicó Pepe Mel ante los medios informativos.
Sobre su relación con la plantilla, fue claro: "La relación que tengo con los futbolistas es bastante buena, ellos saben que mis decisiones vienen dadas por lo que pueden dar en el campo, no van más allá. La relación es buena, entrenamos bien, pero los resultados no acompañan, lo mejor para respaldarme es sudar la camiseta, sólo les pedimos que ellos intenten hacerlo lo mejor posible".