A Seedorf tampoco le funcionan los suplentes

Cada semana llegan a Coruña, numerosas estadísticas nefastas para la parroquia blanquiazul. Con sus malas actuaciones, el Deportivo está cosechando números muy pobres en todos los aspectos relacionados con el juego. Uno muy preocupante pone en tela de juicio la labor del cuerpo técnico y el fondo de armario coruñés.

Según @FútbolAvanzado, el Dépor es el equipo en el que menos influyen los cambios realizados por el entrenador cuando el partido se encuentra igualado o con una diferencia máxima de un gol en contra. Este dato pone sobre la mesa las múltiples carencias del club gallego en diversos apartados como pueden ser la planificación de la plantilla, las decisiones del técnico o el nivel de forma y compromiso de algunos jugadores.
Los de Riazor, no solo no consiguen marcar, sino que reciben hasta dos goles de media en lo que va de temporada. Unos números alarmantes para un equipo que necesita urgentemente tantos que reviertan una situación límite, y que ve como desde el banquillo no dispone de revulsivos para ello.
Aunque esta estadística es la mezcla de los tres entrenadores de la temporada, debemos poner el foco en el actual técnico. En sus cuatro partidos hasta la fecha, se observa con total claridad la carencia del Dépor en estos menesteres. Ninguno de los cambios ha servido para variar las situaciones que manejaba el Deportivo en el encuentro, incluso los resultados han empeorado en dos de los cuatro partidos.
En el debut de Seedorf ante el Betis, el holandés realizó tres cambios. El primero en el minuto 18 por lesión de Fede Valverde, en el que entró Borges con 0-0 en el marcador. Aunque no tuvo incidencia directa, el efecto de la sustitución no mejoró al equipo. Con 0-1 dio entrada a Fede Cartabia y Mosquera, que tampoco dieron un vuelco al marcador. Durante su segundo partido, contra el Alavés, Seedorf utilizó los mismos suplentes para variar el gol de Munir, pero no sólo no tuvo consecuencias positivas, sino que el nivel del equipo descendió de manera evidente.
Contra el Espanyol, en el mejor encuentro de esta etapa, los revulsivos fueron Muntari, Colak y Borja Valle, los cuales aunque ofrecieron una buena imagen, no variaron el sino del choque. Finalmente, el pasado miércoles, los cambios fueron anecdóticos, la ventaja ya era de 2-0 para el Getafe y no supusieron ningún acicate anímico para soñar con revertir un resultado muy negativo.