Rubén Martínez, portero del Deportivo, se ha ganado la renovación automática por partidos disputados tras haber alcanzado los 25 con el de este viernes en el estadio de Butarque ante el Leganés. Rubén, cuestionado desde la pretemporada, combinó a lo largo del curso errores groseros y buenas intervenciones.
Aunque ni él ni el resto de los guardametas que comenzaron LaLiga Santander convencían al primer entrenador del Deportivo, Pepe Mel, que había pedido refuerzos para la portería por activa y pasiva, Rubén fue elegido titular en las dos primeras jornadas ante el Real Madrid y el Levante.
En el primer parón del campeonato por los partidos de las distintas selecciones nacionales, Rubén se lesionó el pulgar de la mano derecha y estuvo más de dos meses de baja, tiempo en el que ninguno de sus sustitutos se ganaron la confianza de Mel y tampoco del siguiente entrenador, Cristóbal Parralo.
Tras recibir el alta médica, recuperó la titularidad en la duodécima jornada y la mantuvo hasta la vigésimo séptima, en la que el tercer entrenador, Clarence Seedorf, le dio el puesto a Maksym Koval, uno de los refuerzos invernales del equipo.
El ucraniano tuvo un pésimo debut ante el Eibar, fue expulsado en el primer periodo y Rubén completó ese partido y fue titular en los siguientes siete, lo que le ha permitido alcanzar los 25 que figuraban en su contrato para ampliarlo.