Un punto que no cura la herida
Sin margen de error. Así afrontaba el Deportivo su décimo partido de LaLiga SmartBank frente al Almería. Así lo había asegurado su entrenador, Juan Antonio Anquela, que afrontaba este domingo su examen final en el banquillo coruñés. La materia a superar presumía complicada. El Almería del jeque llegaba con ganas de recuperar la dinámica de su buen arranque liguero después de dos derrotas consecutivas. El conjunto de Anquela peleó por salvar la cabeza de su entrenador, ofreció una mejor imagen, pero no fue capaz de ganar. Otro empate y un punto que no cura la profunda herida de este equipo.
El Dépor empezó más despierto que en partidos anteriores. Longo y Valle ya tocaron balón en los primeros minutos en campo visitante. Riazor aplaudía porque veían en el campo a un equipo mejor posicionado y con buenas intenciones. El primer disparo a puerta corrió a cargo de los blanquiazules y salió de las botas de Ager Akexe. El tiro era lejano y lo detuvo René pero los deportivistas se gustaban. El conjunto coruñés comenzó enchufado. La pelota no quemaba y eso era una gran noticia para la parroquia herculina.
El Deportivo sacaba mejor el balón desde atrás. Se notaba el buen hacer de Peru Nolaskoain. Los coruñeses arrancaban de un modo diferente desde la zaga y lo hacían mejor que en partidos anteriores. El conjunto de Anquela disfrutaba en campo contrario. La tuvo Borja Valle pero no consiguió acertar para batir al portero almeriense. Los visitantes despertaron en el minuto 24. Tembló la defensa coruñesa porque Juan Muñoz se quedó sólo ante Dani Giménez aunque estaba en posición de fuera de juego.
Ager Aketxe tuvo una de las suyas en el 32. El vasco buscó la sorpresa ejecutando una falta lejana de la portería de René. El guardameta visitante la detuvo con dificultades. Los blanquiazules tenían confianza y el público que protestó fuera del estadio antes del partido por la gestión de la directiva aplaudió sin cesar durante el desarrollo del juego.
Cinco minutos más tarde llegó de nuevo una ocasión a balón parado para el Dépor. Aketxe se atrevió a lanzar a treinta metros de la meta rival y René tuvo que enviar el balón a córner. Los goles no llegaban pero los blanquiazules demostraban calma y criterio. Se llegó al descanso con empate a cero en el marcador y con un Dépor superior.
La segunda mitad comenzó también con una jugada ofensiva del Dépor. Un buen centro de Mollejo sobre Samuele Longo al que no consiguió llegar el italiano siguió animando al público de Riazor. Sin embargo, acto seguido pudo adelantarse el Almería porque Peru falló y regaló el balón a Lazo. La suerte, esta vez, estuvo de cara de la portería defendida de Dani Giménez.
Los blanquiazules cometían más imprecisiones en la segunda mitad. Muñoz ganó la carrera a Montero y envió el balón al palo. Lo visitantes ganaron protagonismo aunque el Dépor no se apagaba. El equipo de Anquela siguió mostrando buenas sensaciones y creando ocasiones. El público llevaba a los jugadores en volandas.
En los minutos finales el Deportivo tuvo juntas todas las ocasiones de peligro de la temporada. Y cuando mejor estaba el Dépor, en una de esas acciones, Montero da un manotazo que le cuesta la expulsión tras la revisión del VAR. Los blanquiazules acabaron el partido con diez hombres, con ocasiones pero sin una victoria.