Un Dépor que pelea por el ascenso a Segunda y un Compos cuyo objetivo es conseguir la salvación en Segunda B se cruzaban este domingo en el Vero Boquete de San Lázaro sin poder contar con el aliento de la afición. Atrás quedaron aquellos derbis en Primera División.
Ahora sonaba otra canción. Fernando Vázquez regresaba al estadio que le dio la oportunidad de convertirse en entrenador de fútbol profesional y lo hizo con un discutido planteamiento y un bochornoso partido del Deportivo. Un encuentro de pena y sin gloria. No hubo goles y, de haberlos, pudieron ser del Compostela, que apretó hasta el final a los herculinos. Ellos sí que arriesgaron.
Tarde de estreno para el Deportivo que vestía por primera vez su segunda equipación oficial de la temporada con el amarillo como protagonista. Lo que sí repetía el conjunto de Vázquez era la alineación con respecto al primer partido contra el Salamanca. Los herculinos arrancaron con Claudio Beauvue como único punta.
Por la contra, el Compostela salió con un atrevido esquema. Yago Iglesias apostó de inicio con un 4-3-3 dispuesto a plantarle cara al Dépor. Y es que fueron los santiagueses los que primero se encontraron cómodos en el partido. Tomaron la iniciativa y Juampa Barros a punto estuvo de sorprender a Carlos Abad desde la derecha cuando aún no se habían cumplido diez minutos de juego. El Compos arrancó sin complejos.
Una jornada más, el Deportivo contaba en sus filas con un único lateral izquierdo. Héctor Hernández seguía lesionado y Salva Ruiz fue titular en esa demarcación, aunque arrancara la semana con molestias. Unas molestias que reaparecieron en el Vero Boquete a los veinte minutos de juego. El valenciano tuvo que retirarse del verde y pasó Eneko Bóveda a jugar a pierna cambiada. Para el lateral derecho entró el canterano Jorge Valín.
Tres minutos antes del descanso, Keko Gontán tuvo la más peligrosa para el Dépor. El de Brunete, uno de los más activos hasta ese momento, disparó desde fuera del área y al despeje de Pato Guillén llegó Celso Borges para enviar el balón al fondo de la red santiaguesa. Una pena. El costarricense estaba en fuera de juego.
Curiosamente, era de las primeras veces que el tico tocaba la bola. Poca presencia había tenido hasta ese momento. Su única intervención de la primera parte pudo resultar clave pero su gol fue anulado por posición antirreglamentaria. No marcó el Dépor ni tampoco lo hizo el Compos en una igualada primera mitad que acabó con empate a cero en el marcador.
El Compostela arrancó la segunda parte avisando con una clara ocasión de gol de Miki. Y acto seguido, Beauvue recibió un golpe en la mano y tuvo que abandonar un rato el terreno de juego, dejando al Dépor momentáneamente con diez y al equipo local poniendo en apuros a los herculinos.
Unos apuros que volvió a tener el conjunto de Vázquez de nuevo en el lateral izquierdo. Bóveda se rompió solo y no pudo continuar. Entró Derik Osede y también metió Vázquez a Uche Agbo y a Miku. Pero seguía con un único punta, ya que salió Beauvue. El más peligroso en el Dépor pasó a ser Nacho González. El uruguayo mandó un gran disparo a la cruceta de la portería defendida por Pato Guillén.
Pero hacían falta más ocasiones. Miku seguía perdido en ataque y a ocho minutos del final, Rui Costa debutó para acompañar en el área al venezolano. No sirvió de nada su entrada. El Dépor dejó escapar la victoria y empató sin goles en el Vero Boquete. Un punto que sabe a poco y que hizo sufrir hasta el final a los deportivistas.