Hace un año cuando Juan Carlos Escotet y Fernando Vidal explicaban los términos del acuerdo entre el Dépor y Abanca llamó la atención el adjetivo utilizado por el banquero venezolano para referirse a la situación financiera del Deportivo. "Escarallada" fue entonces la palabra usada por el presidente de Abanca.
"En términos de estructura financiera nunca he visto a una empresa tan 'escarallada' como esta, sobre todo por el nivel de incertidumbre. No hay manera de hacer sostenible una empresa con los números actuales y con tal nivel de incertidumbre pero apostando a medio y largo plazo y entendiendo que aquí se va a profesionalizar la empresa lo máximo posible, va a ser viable y rescatable. La única forma viable es apostar por el futuro y eso podéis tener la certeza que lo haremos hasta donde sea necesario" afirmaba Escotet.
Un año después, y ya con la inyección económica insuflada, se podría decir que desde el punto de vista deportivo, el Dépor es el equipo más "escarallado" de todos sus tiempos. Así, tras la dolorosa derrota ante el Compostela de este domingo en Riazor el equipo de Rubén de la Barrera ocupa la peor clasificación de su historia. Así lo confirma el dato aportado por el periodista de la TVG, Alfonso Hermida y que ha entristecido al deportivismo. Un duro golpe de realidad.
O Deportivo é 6º na clasificación conxunta dos grupos 1A e 1B (10º por coeficiente de puntos)
👉É a peor clasificación da historia do club coruñés.
O 26 de outubro de 1980 era 5º na 2ªB daquel ano.
O 20 de outubro de 1974 era 4º na 3ª división daquel ano (non había 2ªB)
— Alfonso Hermida (@alfhermida) January 24, 2021
La situación del Deportivo es alarmante. La crisis que atraviesa el equipo coruñés, con sólo dos puntos sumados de los últimos quince, lo coloca en un momento de extrema gravedad. Ahora mismo es tercero, pero es algo virtual a la espera de que se actualice la clasificación. Si sigue esta trayectoria, el Dépor dirá adiós al ascenso al fútbol profesional y tendrá que pelear por no descender a la Segunda División de la RFEF. Y lo que podría ser aún peor, quedar entre el séptimo y el décimo y entonces volver al fútbol profesional sería cuestión de años.
ningún socio le echaría en cara a Abanca disolver la sociedad...con 13 meur de presupuesto es una vergüenza y desde luego cuanto mas tarde Escotet en tomar decisiones peor para el. como cliente de Abanca y socio entendería que el club desaparezca