El Deportivo ha decidido recurrir la segunda tarjeta amarilla que vio Alberto Quiles el pasado domingo en Balaídos ante el Celta B. Desde el club coruñés entienden que no hubo simulación en la caída y agotarán todas las vías posibles para que el máximo goleador del equipo y de la categoría pueda jugar el próximo sábado en Riazor ante el Rayo Majadahonda.
Tras la polémica decisión del colegiado Arberola Rojas, el delantero andaluz tendría que perderse el próximo choque con el Dépor correpondiente a la jornada 30 en Primera División RFEF por sanción pero el club coruñés intentará demostrar con pruebas videográficas que no hubo intención de engañar al colegiado.
Es más, el propio Quiles manifestaba tras su expulsión que, incluso se había hecho daño en la mano al caerse. "En ningún momento me tiro, me tropiezo, me caigo y hasta me hago daño en la mano. No quiero engañar, me estaría engañando a mí mismo. El árbitro me dijo que se jugaba su carrera si pitaba penalti, que era amarilla. Yo le digo que no me tiro, me caigo. Le digo, no lo pites y punto. Así no te juegas tu carrera", declaró el delantero blanquiazul encargado de poner el gol del empate deportivista en el minuto 68'.
"Fui al vestuario a decirle que no podía sacarme la segunda amarilla. La primera es culpa mía, pero la segunda...Me dijo que Mario se había tirado un par de veces en el primer tiempo, que era la tercera y no podía ser. Le dije que se la tenía que sacar a Mario", continuó un indignado Quiles que aguarda que el recurso presentado por el Deportivo llegue a buen puerto y pueda jugar el sábado a las 19.00 en Riazor.