Borja Jiménez, obligado a adaptarse en la adversidad: las lesiones merman una posición clave para el Deportivo

Borja Jiménez y su Deportivo se encuentran en problemas. Más allá de los 11 de 18 puntos posibles, el equipo todavía está lejos de madurar y su juego es mejorable. Pero, por si el arranque de por sí no es bueno, las lesiones tampoco se lo están poniendo fácil. Después de una pretemporada en la que varios jugadores se perdieron parte de la preparación, la enfermería no ha hecho más que llenarse en este inicio de curso.

Álex Bergantiños ha sido el último en caer y los pronósticos no son halagüeños. Todavía no hay parte médico oficial, pero se espera que sea baja ante el Rayo Majadahonda. Eso obligará a Borja Jiménez a volver a hacer cambios. Por séptima jornada consecutiva, el técnico abulense tendrá que variar su once inicial. Todavía no ha repetido equipo desde que ha empezado la temporada. Hay varias posiciones en las que no terminan de haber fijos, pero es que además las lesiones le impiden hacerlo. Tras la victoria ante el Talavera, donde ya se lesionó Isi Gómez en el calentamiento, cayeron Carnero, suplente aquel día; Trilli, que acumulaba dos titularidades; y Alberto Quiles, hasta ese momento indiscutible, entró en el descanso contra el San Fernando.

A lo largo del mes de septiembre, Borja Jiménez se ha referido en varias ocasiones a los pequeños problemas musculares que han impedido que llegasen todos al 100% al inicio de temporada. Además de la necesidad de adaptación de jugadores como Pablo Martínez, que tuvo que hacer una pretemporada particular; u hombres como Zalazar o Svensson, llegados a última hora.

Las lesiones dejan coja una posición clave para Borja Jiménez

Donde más preocupación existe en estos momentos para el ex entrenador del Cartagena o Mirandés es en el centro del campo. El cuadro herculino planificó una temporada con cuatro efectivos para dos posiciones, pensando en jugar en un P-4-2-3-1 que utilizase un marcado doble pivote. Aunque ahí pueden -y ya lo han hecho- entrar otros jugadores como Rubén Díez, esto ha sido en contextos puntuales.

Sin embargo, Borja Jiménez se ha encontrado de lleno con una plaga de lesiones que ha afectado, sobre todo, al medio campo. Primero con la lesión de Isi Gómez, un jugador que llegaba para ser importante pero que, por desgracia, todavía no ha podido tener continuidad. Ante el Talavera iba a vivir su primera titularidad, pero se lesionó en el calentamiento.

El último en caer ha sido el capitán. Álex Bergantiños también se ha lesionado, por lo que, de cara al próximo encuentro, solo estarán disponibles Roberto Olabe y Diego Villares. Y lo peor de todo, desde hace dos jornadas el Dépor viene jugando con tres hombres en la medular. El veterano centrocampista ocupaba la posición de mediocentro defensivo, por detrás de los otros dos centrocampistas mencionados. Aunque en muchas ocasiones se unía a los centrales formando una línea de cinco, parecía que Borja Jiménez empezaba a ver en ese P-5-2-3 una buena alternativa para dar rienda suelta a sus talentosos mediapuntas.

La lesión de Bergantiños obliga al técnico deportivista a volver a rotar. Jairo Noriega se perfila como la opción principal para aparecer desde el banquillo, aunque para el inicio, el abulense tendrá que inventarse otro plan.