Rubén de la Barrera se reestrenó esta mañana en Abegondo. Por primera vez trabajó a puerta abierta y, aunque no hizo pruebas con su posible once inicial, el cual será una incógnita de cara al partido del sábado, podemos sustraer algunas pistas de cara al planteamiento del fin de semana y del futuro. El nuevo entrenador blanquiazul explicó que el equipo tenía que volver a los básicos y simplificar la idea para recuperar seguridad. Algo que refrendó también Álex Bergantiños. Este sábado en Riazor veremos en acción la nueva versión (3.0) de los blanquiazules y estas son tres pistas de lo que podría cambiar.
El propio Rubén de la Barrera advirtió que no se volvería loco tras su llegada al Deportivo. Y, la verdad, existe cierta continuidad entre Borja Jiménez (ataque más posicional y mayor riesgo desde la base); Óscar Cano (ataque funcional con mayor seguridad en construcción y juego más en corto) y Rubén de la Barrera (a descubrir, aunque su idea siempre ha estado marcado por ser proactivo en la presión y atrevido con el balón).
Sus dos primeros entrenamientos en Riazor tuvieron una marcada mirada táctica. Pero no se pudieron observar. Fueron a puerta cerrada. Por eso, para este viernes, el técnico trabajó transiciones, finalizaciones y acciones de saque de banda. No probó su once, aunque hemos podido observar varias ideas que podría plasmar de aquí en adelante.
El Deportivo de Óscar Cano pecaba de ser un conjunto muy interior. Al pie, los mejores de la categoría. Pero previsible para el rival. Solo las subidas de Antoñito y en menor medida Víctor Narro (hasta que se fue) aportaban profundidad exterior y amplitud horizontal.
Esto podría acabarse con Rubén de la Barrera. Ya lo veremos a partir del sábado, pero este viernes trabajó en ejercicios reducidos (habituales de las sesiones) con dimensiones un poco más anchas. Las piezas elegidas nos darán pistas, pero una de las indicaciones en las que insistió fue en la finalización de jugadas atacando por carriles exteriores. Llegar a área rival más por fuera. Mover de lado a lado para aprovechar lado débil. Atraer fuera para finalizar dentro, y no hacer y deshacer por los pasillos interiores.
"Está intentando matizar ciertos movimientos, ciertas fases del juego como salida de balón, saques de puerta... un poco ver las cosas básicas" - Álex Bergantiños en sala de prensa
Es una máxima de los equipos que quieren tener la pelota. Si quieres disponer de mayor tiempo de balón, tienes que recuperarla lo más pronto posible. Rubén de la Barrera siempre ha sido un defensor de vencer desde la posesión como arma para hacer daño. Y ahí sus equipos han destacado por buenas presiones tras pérdida. Morder sin balón, correr hacia adelante y recuperar el esférico lo antes posible.
Otro de los aspectos en los que podría incidir Rubén de la Barrera, por su pasado en otros clubes y su estilo, es la salida de balón. Aunque ya ha advertido que quería simplificar cosas y no tiene tiempo para pulir muchos mecanismos, seguramente veamos un Dépor que se acerque un poco más en este aspecto al de Borja Jiménez. Con mayor influencia de los centrales y sin necesidad de que los tres centrocampistas estén en la base.
Además, esta mañana en Abegondo dio una indicación a los interiores: cortar cuando el balón llega a banda. Es decir: extremo da amplitud y fija por fuera para que el interior rompa a la 'zona indefendible'. Algo así como el gol de Diego Villares al Celta de Vigo en el partido de ida.
A partir de este sábado se empezarán a disipar dudas sobre el estilo y la nueva forma de juego del Deportivo. Volverá a ser buscar la victoria a través de la posesión. Pero seguro que encontramos desde el primer día matices que veremos cómo se pulen poco a poco.