El fútbol formativo es poco más que una ruleta. Y en equipos como el Dépor que dependen de la cantera, lo saben bien. Son muchos los futbolistas que deslumbran de jóvenes y que no consiguen demostrar su proyección cuando dan el salto al fútbol profesional, y otros en los que no había depositadas tantas esperanzas a base de fuerza y tesón se hacen hueco en la máxima categoría.
Es el caso de Dani Rodríguez. A sus 35 años, el de Betanzos es una pieza clave del Mallorca, equipo en el que ha echado raíces y se ha asentado en el fútbol profesional tras un duro y arduo camino. Como buen coruñés, nunca ha ocultado sus sentimientos hacia el Dépor.
Y es que fue el equipo herculino el que le dio la alternativa en la máxima categoría. Eso sí, su experiencia en el primer equipo se redujo a tan solo 25 minutos en un partido copero frente al Sevilla en 2010.
El tiempo quizás haya podido demostrar que Rodríguez podría haber hecho carrera en el Dépor. Por eso mismo, el betanceiro se muestra muy dolido por no haber tenido la oportunidad de probarlo.
En una entrevista concedida a 'El Tercer Tiempo' de Movistar Plus, Rodríguez admite a Miguel Ángel Moyá que en el Dépor vivió "una época jodida".
"Lo pasé mal cuando me dijeron que no valía para el primer equipo del Deportivo. Lo peor fue la frialdad", @18danirodriguez a @M_A_Moya en MANO A MANO, de #ElTercerTiempo pic.twitter.com/sc7N7xMCDt
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) November 6, 2023
Así se explica Dani Rodríguez. "Lo pasé mal. Estuve once años en el club y llegar al primer equipo se vuelve en tu objetivo personal. Justo el Dépor desciende cuando termino contrato y me dije 'esta es la mía'. Y la verdad es que no".
Nos remontamos a 2011, año del primer descenso a Segunda del Dépor en el siglo XXI tras una época gloriosa. Rodríguez acabó firmando con el Conquense tras ser indiscutible en el Fabril en Segunda B.
Aún así, admite que lo que peor llevó fueron las formas. "Lo que más me dolió y peor llevé fue la frialdad. Me dijeron 'bueno, gracias' y ya está", asevera.