Los mejores debuts en una Eurocopa: ¿Qué equipos llegaron más lejos en su primera participación?

La Eurocopa 2024 será 17ª vez que varios países a través de sus combinados nacionales participen en un torneo por el título de campeones del Viejo Continente. Desde que se comenzara a disputar en 1960 ha habido una serie de equipos que han conseguido llegar muy lejos en su primera participación.

Alemania, Bélgica, España, Italia, Países Bajos o la URSS, son algunos de los países que rozaron, si no la llegaron a tocar, la gloria en su debut. Un título muy importante y en el que los teutones y los españoles son los equipos que más veces se ha llevado el trofeo.

Alemania Federal en 1972

El combinado teutón, que se encontraba entonces divido entre Federal y Democrática, llegaba a esta edición tras no disputar las tres anteriores. Las dos primeras no participó y la que se disputó en Italia en 1968 no consiguió clasificarse. Lo que le llevaba a la Copa que tendría lugar en Bélgica como su año de debut. Un curso que fue la primera vez que se alzaría con el título con un Gerd Müller que hizo cuatro goles entre semifinales y final.

Previamente, se había conseguido colocar primero de grupo sobre Unión Soviética, Bélgica y Hungría. Lo que colocaba que en el paso previo a la final tuviera que batir al cuadro belga, como así hizo por 2-1. Müller con un doblete dio el pase al último partido. Repetiría anotación en la final en la que se impusieron los teutones a la URSS por 3-0. Wilmmer puso el último tanto.

Bélgica en 1972

Los belgas aquella vez también llegaban al torneo por primera vez y se alzaron con un más que meritorio tercer puesto. Un lugar que también fue el que terminó la fase de grupos por encima de los húngaros. Odilon Polleunis, Raoul Lambert y Paul Van Himst fueron sus máximos anotadores con un gol cada uno. Lambert, además, se hizo con un lugar en el equipo ideal del torneo.

España en 1964

El caso de España y ese torneo que se disputó en nuestro país podría señalarse con un asterisco. La razón es que si bien la edición anterior la disputó, el hecho de quedar eliminado se debió a un tema puramente político. De hecho, tras superar a Polonia en octavos de final, el siguiente rival era la URSS. Entonces el combinado nacional se retiró, quedando la Unión Soviética como selección clasificada, y a la postre campeona de la primera Eurocopa.

No fue así la edición siguiente, hasta el punto que primero eliminó a Hungría y superó a los soviéticos por dos goles a uno, dando el título al equipo español. Pereda y Marcelino hicieron inservible el tanto de Jusainov.

Italia en 1968

El combinado transalpino llegaba a la tercera edición que se disputó en su país con el objetivo de sorprender debutando en esta competición. Y así lo hizo, primero con la suerte de la moneda, al disputarse un "cara o cruz", con lo que se impuso a Unión Soviética y, posteriormente, gracias a un partido de desempate ante Yugoslavia tras empatar a uno en el primer encuentro. En aquel encuentro de tablas puso el primero Dzalic para los balcánicos, pero Domenghini colocó el empate a uno en el Estadio Olímpico de Roma.

El duelo de desmpate se jugó el 10 de junio de 1968, dos días después del anterior y esta vez fue un 2-0 el que dio el título y el partido a Italia. Luigi Riva y Anastasi fueron los autores de los goles.

Países Bajos en 1976

El combinado orange llegaba por primera vez a este torneo que se disputó en Zagreb, entonces parte de Yugoslavia. Acabaría en tercer lugar tras vencer a los anfitriones en el encuentro por el tercer y cuarto puesto. Antes había caído por tres goles a uno ante Checoslovaquia, que terminaría siendo la campeona.

Un partido que tuvo que irse a la prórroga gracias al tanto del checoslovaco Ondrus en propia el 77, que igualó la contienda tras el gol del propio Ondrus para su combinado. Sin embargo, Nehoda y Vesely dieron el triunfo a su país. En el partido de consolación Geels, con un doblete y De Kerkhof dieron el triunfo a Países Bajos superando los goles yugoslavos de Katalinski y Dzajic.

URSS en 1960

El primer trofeo cayó en las manos de la Unión Soviética, tras superar a Hungría en octavos por tres goles a uno, el abandono de España les situó entre las cuatro mejores selecciones. En la fase final, que se disputó en Francia, primero superó a Checoslovaquia por tres a cero, con los goles de Ivanov, con un doblete, y Víktor Ponedélnik.

En la final, se impuso a Yugoslavia con un resultado de 2-1. Metreveli y Víktor Ponedélnik dieron la vuelta al tanto de Galic.