Georgia no pudo comenzar con una sonrisa su debut en una fase final continental al caer ante Turquía (3-1), pero Giorgi Kochorashvili tuvo una puesta en escena fantástica con la asistencia en el gol de su selección y con un remate de vaselina al larguero en el minuto 69 que hubiera supuesto el 2-2 tras el tanto turco del madridista Guler. A la desesperada y mereciéndolo, Georgia lo intentó, se encontró con el palo y en la última acción y con el valencianista Mamardashvili en el área rival, llegó el definitivo 3-1 de Turquía.
El seleccionador Willy Sagnol volvió a demostrar que Kocho es uno de sus hombres de confianza y en el estreno continental de Georgia, el centrocampista granota, con el ‘6’ a la espalda, brilló no solamente con esos momentos sino inyectándole al centro del campo intensidad (siete de diez duelos de suelo ganados y forzando cuatro faltas), seguridad en la circulación del balón (62/68 en pases, con un 91% de precisión), capacidad para leer los espacios y las grietas posibles del equipo turco, carácter y presencia (10 recuperaciones y cuatro interceptaciones) y llegada al área desde segunda línea como demostró en las dos acciones en área rival (tuvo otras tres, una en el descuento del partidazo) que entrarán, sin duda, en los mejores momentos de la primera jornada de la fase de grupos.
A Georgia se le notó su condición de cenicienta en el arranque y Turquía golpeó primero, pero se fue desquitando poco a poco y Kochorashvili metió en partido a su selección con una genialidad tras sentar a Kadioglu con una bicicleta y asistir con un toque raso para que Mikautadze, delantero del Metz francés, definiera al palo corto y mandara a la red el esférico ante la locura de su enfervorecida selección en un encuentro pasado por agua en el Signal Iduna Park de Dortmund.
👑GEORGES MIKAUTADZE
1⃣Primer gol en la historia de Georgia en la Eurocopa, y se lo apuntamos al bueno de Georges.
🆚Turquía 1 - 1 Georgia#EURO2024 #EuroRTVE pic.twitter.com/nTMs64gpXQ
— Teledeporte (@teledeporte) June 18, 2024
Kocho fue la energía de una selección que lo intentó hasta el último suspiro y que mereció más. Las opciones de clasificación para octavos (pasan los dos primeros de cada grupo y los cuatro mejores terceros) pasan por no fallar el próximo sábado 22, a las 15 horas, en Hamburgo, ante la República Checa.
Enis Bardhi fue el primer jugador del Levante en participar en una Eurocopa representando a Macedonia del Norte en la Euro de 2021. Nadie lo había conseguido hasta entonces. Bardhi fue un pionero. Su presencia no fue pasajer ya que jugó un papel crucial en los partidos de su selección contra Austria, Ucrania y Países Bajos partiendo desde la titularidad. Su desempeño en el torneo fue notable como se avecina también con Kocho.
Blindado hasta 2027, el Levante se frota las manos ante el escaparate continental que se abre alrededor de la figura de Kochorashvili, y más ahora después de esta brillante actuación personal. La complicada realidad económica, por mucho que el mensaje oficial es que se va a hacer todo lo posible para debilitar lo justo el proyecto deportivo, es que cualquier exposición mediática de esta magnitud, y de cualquier jugador, es un reclamo que podría oxigenar unas cuentas que se sostienen con lo justo. Kocho ha dado el paso para ser una de las revelaciones de la Eurocopa, aunque la derrota pueda eclipsar su brillante actuación.