Mejor portero de la fase de grupos junto al italiano Gianluigi Donnarumma, Giorgi Mamardashvili, meta del Valencia, es una de las claves del éxito del rival de España en octavos. Pero su rendimiento no sorprende en Valencia como ha dejado claro Cañizares y como saben sus compañeros de vestuario que, como Hugo Duro, se alegran por su inseparable amigo y portero pero le piden ya que tenga cuidado que el siguiente cruce es con España.
Todo ha surgido a raíz de una publicación en el Instagram oficial de Giorgi Mamardashvili en la que dice "Noche inolvidable que todos los georgianos recordarán por siempre. Felicidades, hemos escrito otra página de historia. ¡Mantengamos esta unidad y sigamos escribiendo historia juntos! 🇬🇪"
La respuesta de sus compañeros no se ha hecho esperar y Hugo Duro ha sido muy gráfico al poner "Stop", en clara referencia a la trayectoria del meta. Giorgi, no se ha cortado un duro y le ha contestado: "Cuidado ahora"
Insuperable en el juego aéreo y determinante ante República Checa, permitió a los suyos seguir soñando en el segundo partido de la fase de grupos. El combinado checo fue mejor en el encuentro, pero no pudo con el portero de Georgia que, excepto en el gol de Patrick Schick, lo paró todo: completó hasta ocho paradas e igualó los récords de intervenciones de la Eurocopa en un mismo partido con el Donnarumma (ante España en esta edición) y con el albanés Strakhosa (frente a Croacia). Después ante Portugal volvió a ser protagonista con varias paradas en los minutos finales que acabaron por amarrar los 3 puntos. Ahora le toca el turno a España y sus compañeros de vestuario le han dicho: "Stop"
La historia de Georgia es una de las más bonitas de la Eurocopa. Un equipo que llegó como 'Cenicienta', que enamoró al mundo del fútbol con la mítica celebración en el vestuario el día que consiguió la clasificación con un cura bailando entre jugadores y que ahora ha conseguido el pase a unos históricos octavos de final en la que es su primera edición. Son días felices para los georgianos, que celebraron por todo lo alto la victoria a Portugal.
Fue de menos a más en el torneo la selección que dirige el mítico Sagnol. Perdió contra Turquía en la primera jornada, en un resultado (1-3) abultado por una última jugada en la que Georgia asumió el riesgo de subir con todo el equipo al un saque de esquina que acabó en catástrofe. Pero se recompuso ante la República Checa, contra la que logró un empate que le permitió llegar viva a la última jornada.