Diogo Costa fue el protagonista del encuentro de octavos de final entre Portugal y Eslovenia en la noche del lunes. El guardameta del Oporto detuvo los tres penaltis que lanzaron los jugadores eslovenos, un hito sin precedentes que hizo que su selección esté ahora en los cuartos. En el canal de Twitch de ElDesmarque hemos charlado hoy con Juan Carlos Arévalo, uno de sus descubridores.
El canterano de los Dragoes ya destacaba con 15 años en las categorías inferiores del equipo blanquiazul. Por entonces, Julen Lopetegui estaba al mando del primer equipo, donde militaba Iker Casillas.
El portero de Móstoles ya auguró un buen futuro para Diogo. "Es una estrella, va a ser un gran portero", reconoció el ex del Real Madrid. A Julen también le gustaba mucho y hoy Juan Carlos nos ha contado los motivos.
“En Oporto tenían muchísima ilusión en él. Era un niño de 15 años entrenando con Casillas. Ya vimos que tenía un potencial grandísimo”, confiesa el actual preparador de porteros de la Selección Española Olímpica.
“Tenía una técnica de base buenísima. Jugaba con los dos pies, los dos perfiles. Tenía una cosa que nos gustó muchísimo: no se ponía nervioso para nada y eso lo está demostrando en esta Eurocopa. Está dando la talla a un nivel top”, apunta Arévalo.
El ‘22’ del combinado dirigido por Roberto Martínez está siendo un pilar para su equipo. El partido de ayer es un verdadero ejemplo. Pero es que además de los tres penaltis “en la última jugada sacó ese pie que mantuvo a Portugal en la prórroga”, como analizaba el preparador en el canal de Twitch de ElDesmarque.
Desde su paso por las categorías inferiores, todos los que le rodeaban ya eran conscientes de la proyección que tenía. “Él tenía que esperar y madurar y le ha llegado esta temporada, cuando ha explotado”, comenta Juan Carlos.
“Lopetegui sabía que tenía un potencial muy grande. En las categorías inferiores ya nos lo decían. Gracias a ellos, salió a la palestra. Fueron fundamentales los que apostaron por él, nosotros seguimos creyendo en él y fue poco tiempo, pero vimos que había un potencial grandísimo”, reconoce el entrenador.
Esa capacidad para mantenerse al margen de la presión en los momentos decisivos, como explica el protagonista en la entrevista ofrecida al principio de esta noticia, es algo innato para solo unos pocos.
“Es cosa de la cosecha, viene con ello. Es de esos porteros que tienen un potencial grande, una cabeza muy buena y una mentalidad que van agrandando durante su carrera. Nacen con ese nivel de concentración y confianza dentro”, apunta Arévalo.