Dani Olmo presume del gol que evitó emulando al camarero viral: “Con permiso, buenas tardes”

Dani Olmo ha sido uno de los grandes protagonistas en la conquista de la Eurocopa 2024. El centrocampista, quien ha partido como suplente durante gran parte del campeonato como suplente, ha acabado siendo uno de los nombres del torneo.

El futbolista del Leipzig ha terminado siendo la Bota de Oro de la competición europea. Eso sí, compartida con varios jugadores, ya que tanto Dani Olmo, Harry Kane, Mikautadze, Schranz, Gakpo y Musiala han acabado con tres goles cada uno.

Aun así, el mediapunta catalán será recordado por algo más que sus tres tantos. En la final contra Inglaterra, cuando el reloj marcaba el minuto 89, Dani Olmo salvó a la Selección Española.

Con el 2-1 en el marcador, Inglaterra gozó de las últimas jugadas del partido con un córner a favor. John Stones remató el centro al área, el cual fue repelido por Unai Simón. Tras ello, Marc Guehi recogió el rechace y cabeceó hacia portería.

Fue entonces cuando Dani Olmo evitó la prórroga con una acción milagrosa. El '10' aguantó toda la jugada bajo los palos del guardameta del Athletic Club y despejó el disparo inglés con una salvada que será recordada durante los próximos años. De esta forma, los de Luis de la Fuente se libraron del gol y pudieron levantar el título continental.

Con el trofeo ya en su posesión, Dani Olmo presumió de su salvada en redes sociales emulando al camarero más viral de TikTok, Cristian Ventura. "Con permiso, buenas tardes", comentó en su cuenta de X (antiguo Twitter), la frase típica del barman junto a una fotografía del icónico momento.

Unai Simón y la salvada bajo palos de Dani Olmo

Unai Simón, tras el partido ha confesado lo que le ha dicho a su compañero tras salvar la ocasión inglesa. “Te han dado el máximo goleador porque esa cuenta como gol”, explicó el guardameta.

La realidad es que, efectivamente, esa acción defensiva cuenta casi como un gol ya que, tras ese momento, ya no tuvo Inglaterra ninguna opción de empatar la final. El árbitro concedió cuatro minutos más del tiempo reglamentario pero España supo gestionar ese descuento con una madurez extraordinaria.