Sevilla y Roma se han citado en Budapest para disputar la final de la Europa League. El equipo español busca su séptimo título, mientras que el italiano quiere el primero. Mourinho daba las últimas indicaciones a sus jugadores antes de viajar para concentrarse en la final.
El entrenador portugués se ha mostrado serio y pensativo en la sesión de la Roma. Con una sudadera al cuello, se ha paseado por el césped pensando en el plan para parar al equipo de Mendilibar.
También ha mantenido una charla con Tammy Abraham. Mourinho quiere que estar concentrado y con el gol en la mente para poder batir al portero del Sevilla. Durante unos instantes, el entrenador le ha parado para cruzar unas indicaciones de cara a la final.
El entrenador portugués ha podido contar en el último entrenamiento con Paulo Dybala. El argentino venía con molestias y era seria duda, pero parece que se ha recuperado a tiempo y podrá estar ante el Sevilla, aunque parece que no estará de inicio.
Dybala, duda de última hora para el partido, se entrenó con normalidad en los rondos iniciales y en el partido reducido con el que terminó la sesión, pero no se mostró especialmente activo.
El argentino apunta a ser suplente y a tener un papel protagonista en la última media hora o en caso de que el partido se alargue a la prórroga, donde Mourinho confía en que pueda ser decisivo incluso sin estar al 100%.
También ha viajado a Budapest a pesar de estar lesionado, Marash Kumbulla y el jugador que no está inscrito para esta competición como Ola Solbakken. Mourinho quiere hacer de la unión de la plantilla una fuerza infranqueable para su rival.