El juzgado de lo civil número 2 de Barcelona ha condenado al Barcelona a pagar a la empresa MCM Group una factura de unos 200.000 euros (40.000 euros de intereses incluidos), que quedaba pendiente por la construcción de La Masía, que había edificado esta constructora por un importe de 9 millones.El pago de dicha cantidad la había descontado el Barcelona de la liquidación que había realizado a MCM, debido a una deuda que reclamaba un arquitecto, Josep Llobet, que supuestamente había intervenido en la obra; pero el juez ha entendido que esta factura abonada por el Barcelona ha sido indebida, porque no se ha podido acreditar ni concepto ni importe por la que fue emitida.
De esta forma, la deuda contraída por el Barcelona con MCM deberá volver a pagarla el club, después de que en su día ya la abonase al arquitecto que reclamó la misma cantidad.
En su día, el FC Barcelona no realizó el pago pendiente (160.403 euros) que exige MCM por la liquidación de la construcción de dicho centro de formación, y fue demandado por la constructora, que reclamó la cantidad y los intereses que ahora le ha reconocido el juez.
Antes de que las relaciones entre el Barça y MCM se resolviesen en los juzgados, ambas entidades parecía que estaban llamadas a arrancar importantes proyectos cuyos negocios podían generar pingües beneficios con la explotación publicitaria de las fachadas de la Masia.
El contrato lo firmó la junta de Joan Laporta con MCM, pero fue anulado antes de que la de Sandro Rosell redactara uno nuevo.
Debido a la inoperancia de este contrato, para potenciar la publicidad en las fachadas de la Masia, MCM decidió presentar una demanda contra el Barcelona por daños y perjuicios, en la que solicitó 100 millones de indemnización. El juez admitió a trámite la demanda, y el pasado marzo dictó sentencia favorable al club.
No obstante, la empresa Muro Cortina Modular Publicidad (MCM) presentó el pasado junio un recurso de apelación en la Audiencia Provincial contra la sentencia que había desestimado el juzgado de primera instancia número 25 de Barcelona, en la que reclamaba 100 millones de euros al FC Barcelona por incumplimiento de contrato.
La sentencia del juzgado de primera instancia desestimó en su integridad la demanda y, además, el juez dictó que MCM debía cargar con las costas judiciales del proceso. Ante ello, esta constructora ya ha presentado un recurso que deberá fallar la Audiencia Provincial de Barcelona, posiblemente ante del próximo verano.