El entrenador de la Real Sociedad, Eusebio Sacristán, ha restado importancia a las bajas que padece su equipo y no descarta el triunfo ante un Barça que es, a su juicio, "un equipo muy fuerte aunque no juegue Luis Suárez".
El preparador vallisoletano, en declaraciones realizadas tras el último entrenamiento que ha dirigido en la ciudad deportiva de Zubieta, cree que la baja del delantero uruguayo "condicionará su forma de jugar", aunque no disminuye el alto nivel de los blaugranas.
Eusebio confía en que sus jugadores puedan repetir el rendimiento ofrecido en el Sánchez Pizjuán cuando derrotaron al Sevilla por 1-2 y cree que ese encuentro marcó un sendero a seguir en partidos ante los rivales más fuertes de la competición.
"Nos dio mucha alegría la victoria del Sevilla y queremos continuar con esa dinámica. Para ello hay que trabajar bien y cuidar los detalles, para demostrar el nivel competitivo y la mentalidad", ha señalado Eusebio.
Ha rememorado los muchos años y vivencias que tuvo como jugador en el Barcelona, ha reconocido que esa etapa fue "muy importante" en su vida pero ha añadido que su compromiso y pensamiento ahora únicamente se centran en la Real.
Eusebio no se fía de un presunto estado de debilidad de su próximo rival, motivado por los últimos resultados y porque este partido está en medio de una eliminatoria de Liga de Campeones ante el Atlético con el premio de las semifinales.
"El Barça ha demostrado que siempre está concentrado y que le da mucha importancia a cada partido. La Real es un club que sabe plantar cara a los rivales fuertes y, con la ayuda de Anoeta, seguro que vamos a tener opciones", ha señalado.
El preparador realista no ha querido escudarse en las múltiples lesiones que tiene su equipo, la última de ellas la del central titular Iñigo Martínez, y no lo utilizará como excusa en casa si se diera un resultado adverso.
"Estamos tranquilos en ese aspecto y vamos a ofrecer un once de garantías" ha asegurado Eusebio, que avisad e que en cualquier caso "habrá que competir" a su mejor nivel, independientemente del rival al que se enfrenten.