Una sociedad perfectamente equilibrada

El temido tridente ofensivo que formaban con Neymar quedó atrás, pero Luis Suárez y Messi sigue demostrando que se entienden a la perfección en el campo. Ante el Éibar, los dos sudamericanos se encargaron de desatascar un partido que se estaba empezando a poner feo fabricando el primer gol del Barça.

Messi crea, Luis sentencia. El argentino se inventó un pase entre líneas que dejó al uruguayo solo ante Dmitrovic. Luis Suárez, con toda la tranquilidad del mundo, dribló al portero del Éibar y elevó el 0-1 al marcador a puerta vacía.
Tal y como desvelaba Míster Chip, se trata del gol número 52 que fabrican entre los dos jugadores, que además han llegado este sábado a unas cifras perfectas. De esos 52 tantos, Messi ha dado 26 asistencias para que Luis Suárez marque 26 goles, unos números que se calcan a la inversa: 26 goles de Messi que llegaron desde las botas del uruguayo.
Una sociedad sin límites que sigue calentando motores de cara al trascendental duelo del próximo martes en Stamford Bridge ante el Chelsea en el regreso de la Champions League.