El Sevilla ha vuelto a ratificar esta temporada el gusto por jugar finales en los últimos tiempos y en entre ellas las de la Copa, a la que accede por cuarta vez en lo que va de siglo XXI y por novena en el historial del torneo, del que quiere ahora su sexto trofeo de campeón.
La primera final copera del Sevilla fue durante la II República, en 1935, cuando los sevillistas se impusieron en Madrid por 3-0 al Sabadell gracias a un doblete de Guillermo Campanal y a un tercer tanto anotado por Bracero.
Cuatro años después, en la primera Copa del Generalísimo, los sevillistas golearon en la final disputada en Barcelona al Racing de Ferrol (6-2), de nuevo con actuación estelar de Campanal, que marcó un triplete, secundado por Pepillo, autor de dos goles, y Raimundo, que metió el sexto, mientras que Silvosa anotó los dos tantos del conjunto gallego.
Otro equipo gallego, el Celta, fue el rival en 1948 del Sevilla, que saldó de nuevo la final, esta con sede otra vez en Madrid, con una goleada (4-1) tras remontar el tanto inicial de Muñoz con un triplete de Mariano y un gol de Juan Arza.
A la cuarta llegó la primera derrota, la de 1955, cuando el Athletic Club le ganó por la mínima en Madrid, con un gol de Uribe.
La racha que se truncó ante el equipo vizcaíno se mantuvo negativa en la quinta cita, en 1962 en Madrid, cuando dos goles Puskas para el Real Madrid remontaron el que había marcado el sevillista Diéguez.
Se acabaron ahí las finales sevillistas de Copa en la llamada época del 'blanco y negro' y tuvo que espera el club hispalense una larguísima etapa de más de cuatro décadas -45 años- para volver a tener el máximo protagonismo en el torneo.
Ya metidos en el presente siglo, en 2007, los sevillistas casi llenaron por completo el estadio Santiago Bernabéu para medirse en la final de ese año al Getafe, y un gol de malí Frederic Kanouté le dio su cuarto trofeo de campeón.
Desde entonces el club andaluz no ha dejado de verse por las últimas eliminatorias de Copa y en 2010 batió por 2-0 al Atlético de Madrid en el Camp Nou de Barcelona con tantos de Diego Capel y Jesús Navas.
La octava cita fue seis años después, en 2016, y en el Vicente Calderón ante el Barcelona, lo que entonces fue una final inédita entre estos equipos.
El partido lo ganó el Barcelona por 2-0 después de llegarse a una prórroga, y ahora, tras dos temporadas, ambos equipos vuelven a verse con la novedad de la sede, el Wanda Metropolitano.
El Sevilla ansía superar al potente rival, en esta novena comparecencia en la final de Copa, y sumar el sexto título de campeón que no pudo lograr hace dos años.