Ginés Muñoz.
Barcelona, 8 oct .- Tras dos temporadas para olvidar en la que ni siquiera fue capaz de clasificarse para los 'play-off' de la Euroliga, el Barcelona Lassa regresa a la máxima competición continental con un proyecto renovado y el objetivo de volver a pelear con los mejores equipos de Europa.
No logró hacerlo ni en la campaña 2016-17, que acabó con un balance de 12 victorias y 18 derrotas, ni tampoco la pasada temporada, cuando tuvo una actuación aún peor al sumar solo 11 triunfos y perder hasta 19 partidos de la fase regular.
Once bajas, cinco altas y tres renovaciones son los movimientos que ha hecho el club catalán este verano con el objetivo de construir un nuevo proyecto deportivo, tras el fiasco absoluto en el diseño de la plantilla de las dos últimos años.
La entidad azulgrana ha mostrado la puerta de salida a cuatro jugadores con los que apenas contó la pasada temporada: el base Phil Pressey, el escolta Marc García, el alero Radions Kurucs y el ala-pívot Alexander Vezenkov.
Tampoco siguen tres habituales en el equipo el curso anterior: el escolta Peteri Koponen, el alero Rakim Sanders y el ala-pívot Adrien Moerman. Ni el escolta Juan Carlos Navarro, a quien el Barça ha decidido jubilar, pese a que el capitán, a sus 38 años, quería jugar una temporada más.
El Barça también ha cortado a dos temporeros llegados a mitad de campaña como el escolta Edwin Jackson y el pívot Jalen Reynolds, y el pívot Moussa Diagné, cedido la pasada campaña al MoraBanc Andorra, ya no ha regresado al Palau.
Para volver a ser respetado en Europa, el Barcelona ha fichado a al base canadiense Kevin Pangos, que el curso pasado brilló con el Zalgiris de Kaunas; dos tiradores como el esloveno Jaka Blazic (MoraBanc Andorra) y el estadounidense Kyle Kuric (Zenit de San Petersburgo); al que debe ser su gran estrella en esta campaña, el ala-pívot estadounidense Chris Singleton (Panathinaikos); y al ucraniano Artem Pustovyi, que llega para reforzar el juego interior del equipo mientras Kevin Séraphin ultima su puesta a punto tras su grave lesión de rodilla.
La sangría en el vestuario azulgrana empieza a ser un clásico de los últimos veranos, lo que demuestra que en el club no dan con la tecla para confeccionar un equipo competitivo que ilusione a la afición y pelee por los títulos.
Y es que en las tres últimas campañas han pasado por el banquillo Xavi Pascual, Georgios Bartzokas, Sito Alonso y Svetislav Pesic y el Barça solo ha ganado dos trofeos domésticos menores: la Supercopa de España en 2015 y la Copa del Rey de 2018.
Renovado Pesic por un temporada, el club también ha extendido el contrato del escolta Pau Ribas por tres temporadas y del pívot Ante Tomic por otras dos.
Junto a ellos, siguen del curso anterior el base Thomas Heurtel, el escolta Adam Hanga, el ala-pívot Víctor Claver y los pívots Pierre Oriola y Kévin Séraphin.
Tras empezar la temporada perdiendo en semifinales de la Supercopa de España ante el Kirolbet Baskonia y ganando sus tres primeros partidos de la Liga Endesa, el Barça Lassa inicia la Euroliga con aires renovados, una plantilla más talentosa que la anterior y algunas dudas.
El rendimiento de los azulgranas, que de nuevo han tenido que renovarse de arriba abajo para intentar volver a la élite, es una incógnita un año más.