El FC Barcelona cerró este sábado el 2018 con una fantástica victoria ante el Celta de Vigo. Los goles de Dembélé y Leo Messi llevaron a terminar el año de la mejor manera: victoria, líderes y sin goles encajados.
El cuadro azulgrana encadenó su cuarto partido consecutivo de LaLiga Santander sin encajar gol. Desde el empate en el Wanda Metropolitano ante el Atlético de Madrid, el equipo de Valverde ha dejado su portería a cero: Villarreal, Espanyol, Levante y Celta.
Una mejoría considerable en defensa que lleva consigo la confianza que ha adquirido la pareja formada por Piqué y Lenglet. El central francés por fin ha ganado enteros y comienza a asentarse en el eje de la zaga, que junto a la mejoría de Semedo, han sido clave para la solidez.
🔙 Últimos 4 partidos del Barça en @LaLiga
⚽ #BarçaVillarreal (2-0)
⚽ #EspanyolBarça (0-4)
⚽ #LevanteBarça (0-5)
⚽ #BarçaCelta (2-0)
✅ 13 goles a favor
⛔ 0 goles en contra— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 22 de diciembre de 2018
Samuel Umtiti estaba llamado a ser el compañero de Piqué en el eje de la defensa titular, tal y como ha sucedido en las dos últimas campañas. El galo, sin embargo, arrastra problemas en la rodilla desde el pasado final de temporada y, con el Mundial entre medias, aún no ha sido capaz de recuperarse y ha sufrido tres recaídas. No pasará por quirófano, pero está siguiendo un tratamiento conservador para terminar de paliar estos problemas.
El otro defensor, Thomas Vermaelen, es un asiduo de la enfermería y este año está cayendo en sus propios problemas. Hace unos días se supo que el belga estará un mes de baja por una rotura en el sóleo, precisamente coincidiendo con la llegada de la Copa del Rey y un aumento de la carga de partidos. Con estos dos jugadores en el dique seco, Valverde pidió refuerzos y Jeison Murillo llega para tapar esos problemas.