Papá, ¿quién es el chico de las barbas?
El FC Barcelona suma y sigue. El líder de LaLiga Santander, lejos de asustarse por el 'apretón' del Atleti y el Real Madrid, que se colocó tercero esta semana, espantó todo tipo de fantasmas con una victoria... sin Leo Messi. El banquillo contaba este domingo con un invitado especial, un inhabitual en el banco. Papá, ¿quién es el chico de las barbas?
Porque eso sería lo que cualquier niño le preguntaría a su padre al ver al crack argentino sentado en el banquillo. Sonrisa permanente, saludo a los aficionados y bromas durante 45'.
Messi 'alucinó' con el partido de Ousmané Dembélé. Algo que muchos, probablemente, no harían, ya que tendrían fijada su mirada en el mago del Camp Nou.
Ernesto Valverde lo anticipaba en la previa. Y cumplió su palabra. El chico de las barbas lo quiere jugar todo, pero su equipo lo quiere ganar todo. Para ello será necesario que Leo descanse, medite y apriete en los momentos claves. Que cuando llegue la Roma de esta temporada -equipo que eliminó al Barça el pasado año en Champions-, Messi esté a tope.
Pero era demasiado bonito. Hasta escribirlo era bonito.
El Leganés empató, Ernesto Valverde comenzó a no verlo demasiado claro y tuvo que tirar su carta más importante. Leo Messi saltó al verde en el 63' por Aleñá y su papel debía ser más aún decisivo cuando Dembélé se marchó lesionado.
La suerte siempre se busca. No llega, no aparece por arte de magia. Se trabaja, se confecciona y se demuestra sobre el verde. Cuando su equipo más lo necesitaba, Leo Messi se sacó un precioso recorte, disparó a portería y, con colaboración de Cuéllar, le regaló a Luis Suárez el segundo.Y encima, cuando el partido agonizaba y el Leganés soñaba con aprovechar el descuenta, anotó y rompió la ilusión pepinera.
Disfruten mientras puedan, aprovechen cuando se siente en el banquillo, que el chico de las barbas, don Leo Messi, ya está pensando en pisotear a su próximo rival: el Sevilla, en la Copa del Rey.
Hijo, el de las barbas es la máxima esperanza de un club que quiere seguir siendo campeón.