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El primer quebradero para Valverde post-parón

Valverde, en un entrenamiento del Barcelona.
Periodista especializado en Sevilla FC y Betis.

El FC Barcelona vuelve a la competición este próximo sábado para enfrentarse al Espanyol en el Camp Nou en el derbi catalán. Para la cita, Ernesto Valverde deberá cerrar un complejo puzle en su delantera. El temido 'virus FIFA' vuelve a aparecer.

A falta de apenas cuatro días para el encuentro, Valverde no deja de encontrar impedimentos: Luis Suárez sigue recuperándose de su lesión sufrida en Sevilla, Messi continúa luchando contra el reloj tras volver tocado de Argentina, Dembélé está descartado por lesión y Coutinho -que deberá jugar este martes ante República Checa- no encuentra su mejor versión. Sólo Malcom se encuentra 100% sano... pero no cuenta apenas para el entrenador.

Por si fuese poco, Arturo Vidal, hombre utilizado habitualmente por el entrenador para actuar como 'falso atacante' no jugará con Chile hasta el miércoles y será uno de los últimos en llegar a Barcelona.

Con todos los impedimentos argumentos, Valverde comienza a valorar la opción de Kevin-Prince Boateng. Sin apenas opciones, el flamante fichaje invernal del FC Barcelona se podría encontrar en el derbi catalán con su gran oportunidad para demostrar la razón por la que Abidal le encomendó ser el suplente de Luis Suárez.

El colchón existente en la tabla clasificatoria permite a Valverde rotar y reservar hombres a pesar de la importancia del partido y, si el encuentro fuese mañana mismo, el técnico debería apostar por un ataque en el que dos de los tres hombres fuesen Boateng y Malcom.

El 'virus FIFA' se ha vuelto a cruzar con Valverde en el momento más importante de la temporada. El primer quebradero para el técnico post-parón.

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