El pívot del Barça Lassa Kevin Séraphin negó este martes ser un jugador conflictivo, después de que su entrenador, Svetislav Pesic, lo enviará al vestuario tras mantener una discusión con él en el primer cuarto del partido de la Liga Endesa contra el MoraBanc Andorra.
"Nunca fui un chico malo y nunca me quejé ... Sí, me gusta divertirme porque soy más que un simple jugador de baloncesto", contestó desde su cuenta oficial de Twitter a los comentarios de un grupo de aficionados azulgranas en esta red social.
Séraphin calificó de "la broma más grande del año 2019" que digan que es "un mal tipo", pero lo afronta con resignación. "Si la gente quiere mentir y decir lo contrario, entonces esto es la vida y no puedo controlarlo todo. Paz", concluyó.
Sin el concurso del pívot francés, el Barça remontó el partido ante el MoraBanc Andorra en la segunda mitad (79-82) y Pesic no eludió comentar la polémica con el jugador a la conclusión.
"A Séraphin lo hemos estado ayudando desde mi llegada. Todos en el club piensan en cómo ayudarle y él no está contento. Y si no está contento, tiene que descansar y pensar un poco. Yo no le castigué, se castigó él mismo", afirmó el preparador serbio.