Antoine Griezmann ha debutado este viernes como jugador del FC Barcelona. Lo ha hecho, eso sí, de la forma más agria: derrota en San Mamés ante el Athletic Club en el último minuto y partido muy gris a nivel individual.
El francés comenzó el encuentro partiendo desde la banda izquierda. En la primera media hora participó en un par de acciones, pero poco más. Luego, tras la lesión de Luis Suárez, Valverde colocó a Griezmann como delantero centro y su partido acabó siendo fantasmagórico. El francés no participó prácticamente nada en el juego del Barcelona, aunque tuvo un par de ocasiones en el tramo final.