Gerard Piqué lo supo antes que nadie. Este año la directiva del FC Barcelona iba a fichar lo que tenía en mente Ernesto Valverde y así lo hizo. Esta vez no le dio voz a los pesos pesados del vestuario ni a Leo Messi, que solo le concedieron el paripé de Neymar.
El entrenador extremeño pidió a Antoine Griezmann para tener a la delantera en alerta y un lateral zurdo que le gustaba mucho como era Junior Firpo, curiosamente uno que no le hacía ninguna gracia a Leo Messi por sus insultos en Twitter hace varios años.
El Barça le concedió esos fichajes y a parte le trajo un Frenkie De Jong que era un fichaje estratégico, al igual que hubiese sido Matthijs De Jong si la Juventus de Turín no se hubiese vuelto loca por el defensa de 19 años y no le hubiese ofrecido un sueldo de 14 millones de euros por temporada.
Un directivo del FC Barcelona informó directamente a Gerard Piqué que lo de Neymar no iba a salir. Aunque el jugador brasileño estaba forzando para ir al equipo catalán incluso poniendo dinero de su bolsillo parece que para Josep Maria Bartomeu nunca fue una opción.
Y es que el presidente del Barça y varios directivos del club azulgrana no le han perdonado al brasileño su manera de irse, al igual que pasó con Dani Alves, el cuál ha podido llegar gratis este verano y fue pedido por Leo Messi, pero que tras su rajada contra la directiva después de dejar el club estaba vetado por Josep Maria Bartomeu.
Con Neymar presionaron haciendo varias ofertas para que Leo Messi estuviera contento, pero no había ninguna intención de hipotecar el futuro de la entidad azulgrana por un jugador que había preferido el dinero a jugar en el Barça en el pasado.