El FC Barcelona ha culminado más de un mes de búsqueda de un delantero en el mercado de invierno con el fichaje de Martin Braithwaite. Un jugador que sorprende dada la diferencia con los jugadores que viene a sustituir, Luis Suárez y Ousmane Dembélé. El danés llega al conjunto que dirige Quique Setién después de que este enero dijera no un futbolista como Dusan Tadic con mayor bagaje internacional.
Ha sido el propio futbolista serbio el que ha reconocido el interés del Barça en su incorporación en una entrevista para De Telegraaf: "No me sorprendió que quisieran para ficharme para seis meses porque he hecho una temporada excelente. He dicho cientos de veces que estoy feliz en el Ajax y que no tenía razones para irme, porque tengo todo lo que quiero aquí y contrato hasta 2026".
Después del 'no' de Rodrigo Moreno, el Barcelona preguntó por Tadic, pero se encontró con esta negativa. Ahora, Quique Setién deberá confiar en Martin Braithwaite para los partidos de LaLiga Santander y esperar no seguir con la tónica de otros jugadores de ataque que llegaron a los equipos dirigidos por el cántabro en invierno.
Setién no ha tenido suerte en los últimos años con los fichajes del mercado de enero de futbolistas ofensivos. Jesé Rodríguez es el principal exponente de ello, ya que contó con él media temporada tanto en su aventura en la UD Las Palmas como en su experiencia en el Real Betis.
En ninguna de ellas, el delantero canario pudo llegar al nivel que se esperaba de él cuando comenzó a jugar con el Real Madrid. Ni en su isla natal ni en la parte verdiblanca de Sevilla, donde además terminó silbado por su propia afición.
Tampoco triunfaron otros futbolistas jóvenes y de calidad como Alen Halilovic o Diego Láinez. El croata, que pasó por la cantera del Barcelona, perdió incluso la titularidad con Las Palmas mientras que el mexicano aún se mostró muy verde en el Betis.