Mourinho y cómo ser campeón de Europa gracias al fichaje de Ibrahimovic por el Barcelona

Jose Mourinho es un tipo peculiar, nadie lo duda. A pesar de que dio sus primeros pasos en los banquillos desde dentro del FC Barcelona, el portugués siempre ha tenido una curiosa enemistad con el cuadro blaugrana. Ahora, en una entrevista concedida a La Gazzetta dello Sport, explica que consiguió motivar a su plantilla en el Inter de Milán gracias a la salida de Zlatan Ibrahimovic al Camp Nou.

En verano de 2009, Ibrahimovic cambió las filas del Inter de Milán por el Barcelona. El sueco formaría una pareja de lujo con Leo Messi y compañía, mientras que Samuel Eto'o hizo el camino inverso desde el Camp Nou a San Siro. La salida de 'Ibra' dejó muy tocado al vestuario interista, según revela el propio Mourinho.

El fichaje de Ibrahimovic por el Barcelona, clave para Mourinho

El ahora entrenador del Tottenham revela cómo contó el sueco su marcha al Barcelona. "Los problemas empezaron ese verano en un amistoso contra el Chelsea. Los diarios llevaban días diciendo 'Ibra va al Barcelona', 'Ibra no va al Barcelona'. Él, ese día, jugó 45 minutos, porque es un auténtico profesional. Pero en los vestuarios nos dijo 'me voy al Barcelona, voy a ganar la Champions'".

La baja de Ibrahimovic al Barcelona era trascendental para el Inter de Milán. En cambio, el luso consiguió motivar a su plantilla tras aquel adiós. "Mis colaboradores estaban destrozados, decían 'sin él será imposible ganar la Champions', y los compañeros tampoco querían perderle. Yo estaba preocupado, pero al final dije: 'A lo mejor tú te vas y la Liga de Campeones la ganamos nosotros'. Fue una locura, pero en el vestuario cambió el ambiente", explicó en la entrevista.

Y la profecía se cumplió. Durante la temporada 2010, el Barcelona se midió al Inter de Milán en semifinales de la Champions League. El equipo italiano asaltó el Camp Nou con aquella famosa imagen de Mourinho corriendo por el césped. Semanas después, el Inter se proclamó campeón de Europa en el Santiago Bernabéu tras ganar al Bayern de Múnich.