Caía el FC Barcelona en el minuto 87 del partido ante el Granada CF en cuartos de final de Copa del Rey y la remontada parecía imposible. Qué mejor momento para que funcionase esa asociación entre Leo Messi y Antoine Griezmann que tanto ha echado en falta el equipo azulgrana para mandar el partido a la prórroga.
El Barça ya no podía hacer más para marcar, con multitud de ocasiones en todos los colores incluyendo tres disparos al palo. Con todo el Granada metido en su área llegó el turno de Messi de agarrar el balón y de Griezmann de tirar el desmarque.
Un balón al segundo palo del argentino lo cazó el francés cuando los jugadores rivales se habían quedado parados y logró llegar a la pelota, que chocó en el palo antes de rebotar en Aarón Escandell y terminar colándose en su portería. El meta catalán, que lo había parado todo, no pudo evitar que ese balón se convirtiese en el tanto que daba aire al Barcelona.
Los mismos protagonistas se unieron unos minutos después, ya en el 92. De nuevo centro bombeado de Messi desde la frontal al segundo palo y allí apareció Griezmann de nuevo para, esta vez, ponerla atrás y que Jordi Alba llevase el encuentro a la prórroga.
#GranadaBarça 2-2 (90+2') ¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOL!!! ¡¡¡JORDI ALBA ANOTA EL EMPATE!!! #CopaDelRey pic.twitter.com/RmbiGyQt0i
— ElDesmarque Barça (@ElDesmarque_FCB) February 3, 2021