La Asociación Palestina de Fútbol (FPA) ha solicitado al FC Barcelona que no dispute en Jerusalem el amistoso ante el Beitar del próximo 4 de agosto. Junto a más de 200 entidades deportivas, alega que vulneraría los derechos palestinos sobre la Ciudad Santa.
"Aunque no tenemos derecho a decirle a ningún club cómo organizar sus partidos amistosos, tenemos derecho a oponernos a la elección de Jerusalén como sede del partido", declaró el presidente de la FPA, Jibril Rajoub. Lo hizo en una carta enviada esta semana a la FIFA, la UEFA y la Confederación Asiática de Fútbol.
Según este, hay eventos relacionados con el amistoso previstos en la Ciudad Vieja de Jerusalén. Una ciudad situada en la zona oriental ocupada por Israel, la cual los palestinos reclaman como capital de su futuro Estado. De hacerse las actividades en el área, esto supondría "una violación" de los derechos palestinos, aseguró Rajoub en la misiva.
"Según el derecho internacional, Jerusalén es una ciudad dividida y su parte oriental se considera tierra palestina ocupada. Esto otorga jurisdicción a la Asociación Palestina de Fútbol sobre cualquier actividad futbolística que tenga lugar", reclamó.
El amistoso se debe disputar en el Estadio Teddy, en el barrio de Malha. Pese a estar en Jerusalén Occidental -área bajo soberanía israelí reconocida por la comunidad internacional- es un punto sensible para muchos palestinos. En esa zona había una antigua aldea palestina despoblada en 1948, año de creación del Estado de Israel.
En otra carta dirigida hoy al Barça, más de 200 entidades deportivas palestinas le animan a cancelar el partido contra el Beitar Jerusalén. Alegan que, de disputarse, esto sería una forma de "lavar" el "apartheid israelí" a través del deporte.
Según añaden, el estadio que acogerá el partido está solo a pocos kilómetros de los barrios palestinos de Sheij Yarrah o Silwán. Zona situada en Jerusalén Este, "donde Israel está llevando a cabo expulsiones forzosas, demoliciones de casas, represión violenta de protestas pacíficas y arrestos masivos contra palestinos".
"¿Querríais jugar un partido 'amistoso' mientras los palestinos están siendo sujetos a un contexto de violencia colonial, apartheid y desposesión?", preguntan las entidades al equipo catalán.
El Beitar Jerusalén, con quién se enfrentará el Barça, tampoco tiene un perfil neutral en el panorama deportivo. Se le conoce por su afición de ultras racistas que no acepta a jugadores árabes o musulmanes. Es un símbolo de la derecha israelí y figuras como el exprimer ministro Benjamín Netanyahu están entre sus aficionados.
En 2018, la Asociación Palestina de Fútbol se opuso a otro partido previsto en Jerusalén entre la selección de Argentina e Israel, que finalmente se canceló tras una intensa campaña de boicot.
Yo del jugador negocio y le digo busqueme equipo y me voy , y si no quieren iría al filiar por un año m
Yo del jugador negocio y le digo busqueme equipo y me voy , y si no quieren iría al filiar por un año m