El brasileño Dani Alves acaba de aterrizar en la Ciudad Condal y piensa en su presente y futuro en el FC Barcelona. La entidad presidida por Joan Laporta le ha ofrecido un contrato de seis meses, desde enero hasta junio, pero el lateral derecho llega con ganas de más.
La incorporación de Alves a la plantilla dirigida por Xavi Hernández se ha recibido como una gran noticia por gran parte de la afición azulgrana. Con su llegada al club catalán no solo se busca un rendimiento deportivo inmediato sino también que sirve como figura ejemplar dentro de la plantilla. En un vestuario con bastante juventud, el brasileño no solo será respetado sino que actuará como un capitán más.
Esa función la llevará a cabo por lo menos hasta el 30 de junio de 2022, cuando finaliza el contrato que firmará este miércoles. El mismo día se llevará a cabo su presentación, en la que lucirá la camiseta blaugrana con el dorsal 8, de los pocos que quedaban libre.
La realidad es que la ambición de Dani Alves va más allá de los seis meses de contrato. Las pretensiones del lateral son las de renovar en verano y continuar, al menos, una temporada más en la disciplina culé. En su extenso palmarés aún falta un título, el de la Copa del Mundo.
Precisamente al próximo Mundial es al que quiere llegar, el cual se celebrará en Catar entre los meses de noviembre y diciembre de 2022. Su regreso al Barcelona no solo le sitúa en un foco importante en el panorama europeo, sino también le exige el mayor rendimiento posible a sus 38 años.