Un Barça de cristal se rompe ante el Real Madrid
El Real Madrid se llevó el primer Clásico de la temporada tras completar un partido bastante serio, inteligente, en el que optimizó al máximo sus virtudes y los defectos del Barcelona en defensa, sobre todo los de Eric García, que, como Xavi, acaba muy señalado al término de este encuentro.
Realmente, el Real Madrid se mostró muy superior al Barça en conjunto, en lo colectivo, en todas aquellas facetas que tenían que ver con el equipo. El equipo de Xavi tuvo una capacidad de respuesta muy limitada ante tanta seriedad merengue, y siempre basada en algunas individualidades. Pero realmente no fue un oponente de igual a igual. El conjunto blanco dio sensación incluso de suficiencia en algunas partes del choque, y por eso en el tramo final estuvo a punto de llevarse un susto, hasta que Eric García 'devolvió' las cosas a su sitio.
El análisis táctico del partido del Real Madrid es muy sencillo. Le dio el campo al rival casi siempre para poder salir a la contra y descoser la zaga culé, la débil zaga culé, todo sea dicho. El primero en explotarlo fue Kross, que montó con una conducción y resistiendo el envite de Busquets una contra que luego Vinicius y finalmente Benzema convirtieron en el 1-0. El 2-0 fue de Valverde, aunque también del brasileño, que 'aguantó' el acoso (ironía on) de la defensa azulgrana hasta para tomarse un café, fumarse un puro y luego abrir a Mendy y que este encontrara al uruguayo, que definió de cine.
El análisis táctico del partido del Barça es complejo o sencillo, según se mire. Xavi quizás no eligió los mejores para jugar ante el Madrid, empezando por un desdibujado y superado Balde en lugar de Alba, y luego se encontró con un mal partido de su zaga, en especial de Eric García. No en realidad por su desafortunado despeje en el 2-0, eso puede ser hasta mala suerte además de error técnico. Fue por la laxitud ante los delanteros madridistas, siempre dando metros, siempre dejándoles recibir, y siempre entrando a destiempo cuando no debe. Así mató al Barça Eric García, haciendo un penalti absurdo con 2-1 en el marcador y dejando el encuentro visto para sentencia cuando el equipo de Xavi agotaba sus opciones de empatar gracias a Ansu Fati, al que el técnico culé solo le dio menos de 20 minutos.
El Real Madrid es un equipo, juega como un equipo y su entrenador, Carlo Ancelotti, ha construido un equipo de muy buenos jugadores. El Barcelona es a día de hoy un grupo de buenos jugadores que está muy lejos, muy lejos de ser un equipo, tanto como Xavi demostrar que es capaz de construirlo.