La caza de brujas de Joan Laporta en el vestuario del Barça encuentra a 3 sospechosos

El Barça se impuso con comodidad al Villarreal, y varios jugadores que a priori tienen un papel secundario con Xavi Hernández rindieron a un gran nivel, mejor incluso que los teóricos titulares. Una cosa bastante extraña, y que debió de sorprender a todos, excepto a Joan Laporta. Porque tres futbolistas que tienen un rol muy importante han sido señalados por el presidente, como cuentan en ‘El Nacional’, y cree que hay un motivo de peso que explica el bajo rendimiento que están ofreciendo recientemente.

Concretamente, sospecha que están dosificándose para poder llegar a tope al Mundial de Catar. Así que han quitado el pie del acelerador, y están intentando no arriesgar para poder acudir al torneo sin riesgo de lesionarse ni de acumular cansancio en sus piernas. El primero que ha sido acusado de esto es Ousmane Dembélé, quien está irreconocible en las últimas semanas, y ha pasado de ser uno de los cracks más destacados, a pasar desapercibido.

Cuando más se le ha necesitado, en encuentros decisivos como el Clásico o frente al Inter de Milán, el francés ha pasado de puntillas y ha cometido muchos errores. Exactamente lo mismo que ha sucedido con Raphinha, que impresionó a todos durante sus primeros duelos en el Camp Nou, pero claramente ha ido de más a menos a medida que avanzaba la campaña. Para Laporta, no es casualidad, y opina que ambos ya tienen la cabeza puesta en la Copa del Mundo.

Pese a esto, Xavi no se había atrevido a sentarlos en el banquillo, cosa que hizo frente al ‘Submarino Amarillo’, y por obra de arte, el Barça recuperó la senda de la victoria, y no solo venció, sino que también convenció. Quizás en estos momentos, lo mejor es prescindir de ellos, hasta que vuelvan a estar plenamente implicados en la causa. Y en ‘El Nacional’ también apuntan a Sergio Busquets como otra pieza de la plantilla que estaría haciendo lo mismo.

Las desastrosas actuaciones que ha cuajado son impropias de un jugador de su talla y de su experiencia, y Laporta se huele que está únicamente concentrado en llegar en buen estado a su último Mundial.