Xavi lo cambia todo delante de Joan Laporta y lo que pasa en el Barcelona es absolutamente brutal

Xavi Hernández puso cuatro centrocampistas (Sergio Busquets, Frenkie de Jong, Pablo Páez ‘Gavi’ y Pedro González ‘Pedri’) de inicio por primera vez este curso la noche en la que brilló un extremo, Ousmane Dembélé, con un gol y tres asistencias en el triunfo del FC Barcelona por 4-0 ante el Athletic Club de este domingo en el Spotify Camp Nou con Joan Laporta viéndolo todo desde el palco.

Este dibujo provocó que en el once titular tan solo Dembélé hiciera las funciones de extremo después de que se acusara a Xavi durante este principio de temporada de dar demasiado protagonismo a las jugadores de banda en detrimento de los ‘jugones’ del centro del campo. Por segundo partido consecutivo, Raphinha fue suplente.

El jueves en la victoria ante el Villarreal (3-0), Frenkie de Jong dio una exhibición como pivote, el puesto habitual de un Sergio Busquets que fue uno de los jugadores azulgranas señalados el pasado fin de semana en la derrota en el Clásico (3-1). Así, la duda era si ante el Athletic Club Xavi daría otra vez la brújula del equipo al neerlandés o apostaría por la veteranía del capitán.

Finalmente, Xavi se decidió por contar con ambos: devolvió a Frenkie de Jong a la posición de interior izquierdo haciendo pareja con Gavi, el interior derecho, y Busquets gobernó desde el pivote. Pedri, por su parte, se escoró a la banda izquierda del ataque, aunque participando mucho en la creación del juego por dentro y en las ayudas defensivas, y dejando libre el carril de extremo para las subidas del lateral Alejandro Balde.

Xavi y Ousmane Dembélé

Pero, precisamente, el 1-0 llegó gracias al único extremo que Xavi puso de inicio: Ousmane Dembélé. El francés, en un instante en el que el mundo funcionó al revés, remató de cabeza de forma inapelable un centro de quien los suele llevar al fondo de la red, Robert Lewandowski.

El mismo Dembélé, como si quisiera seguir reivindicando la aportación de los extremos el día en el que Xavi decidió dar más poder al centro del campo, puso desde la banda derecha un balón interior a Sergi Roberto para que el catalán firmara el 2-0 y, poco más tarde, le devolvió la asistencia a Lewandowski para que el polaco sentenciara el partido. Todo ello lo ejecutó el imprevisible Dembélé en los primeros 23 minutos de partido.

Xavi tampoco quiso cambiar el dibujo con cuatro centrocampistas cuando Gavi tuvo que retirarse con molestias en el minuto 32. El escogido para ocupar su lugar fue otro mediocentro, Franck Kessié. El cuadrado del Barça en el centro del campo no se desintegró hasta que en el minuto 62, ya con Xavi pensando en el partido ante el Bayern Múnich del miércoles en la UEFA Champions League, sustituyó al centrocampista Pedro González ‘Pedri’ y al delantero Lewandowski por dos atacantes, Ansu Fati y Ferran Torres. Éste último marcó el 4-0 definitivo después de un nuevo pase interior de Dembélé.

El francés se fue ovacionado por el público del Camp Nou a falta de 15 minutos para el final del encuentro para dar entrada al centrocampista Pablo Torre, cambio que provocó que regresara el cuadrado en el centro del campo.