El Barça está perfilando el centro del campo que habrá la próxima temporada, en el que no formará parte Sergio Busquets. Ha tomado la decisión de hacer las maletas y marcharse cuando finalice la presente campaña, cuando expira su contrato. Y esto obliga a Joan Laporta a tener que buscar a un recambio de garantías que sirva para llenar el vacío que dejará el capitán de la plantilla, que es intocable para Xavi Hernández.
Por esa misma razón, el técnico de Terrassa había hecho todo lo posible para intentar convencerle de que se quedara, y firmara un nuevo vínculo, pero no había nada que hacer. Por lo tanto, no queda de otro remedio que tener que acudir al mercado para fichar a un pivote defensivo que pueda asumir la responsabilidad de hacer olvidar al ‘5’. Han sonado varios candidatos, pero no hay dudas sobre quién tiene el honor de ser considerado el principal favorito.
Y es que Martín Zubimendi es la opción que más convence al exentrenador del Al-Sadd, que ya solicitó su incorporación hace unos meses. Le ve como un acompañante ideal en la medular para Frenkie de Jong y para Gavi, con Pedri González más avanzado. No obstante, hay un problema grave, que es el precio de salida que le ha colocado la Real Sociedad, de 60 millones de euros, lo que marca su cláusula de rescisión. Una cifra que en el Camp Nou no quieren pagar.
No hay dinero suficiente, y primero tendrían que obtener ingresos con la venta de varios miembros del equipo. Pero Laporta confía en poder rebajar ligeramente ese coste, y como explica el diario El Nacional, espera poder acabar firmando al mediocentro de 24 años por unos 50 ‘kilos’. Sigue siendo una incorporación cara, pero algo más asumible. En el Barça se mantienen cautos, pero con un ligero optimismo.
Xavi cruza los dedos para poder acabar contando con los servicios del internacional español.