La estadounidense Megan Rapinoe, elegida la mejor jugadora de la final del Mundial femenino de Francia 2019, se llevó también la Bota de Oro y el reconocimiento a mejor futbolista de todo el torneo.
La jugadora del Seattle Reign fue la gran protagonista en la cuarta conquista mundialista del combinado de las barras y las estrellas. Contribuyó a la coronación con seis goles -uno de ellos en la final ante la selección de los Países Bajos-, y se llevó la Bota de Oro como máxima realizadora del certamen.
Igualó los seis tantos de su compatriota Alex Morgan, Bota de Plata, y de la inglesa Ellen White, Bota de Bronce, pero repartió tres asistencias a sus compañeras.
Megan Rapinoe, la goleadora de mayor edad en una final mundialista a sus 34 años y 2 días, fue designada igualmente como la ganadora del Balón de Oro, por delante de la inglesa Lucy Bronze y de la también estadounidense Rose Lavelle, autora del 2-0 en la final ante el equipo neerlandés.
Precisamente, la guardameta 'oranje' Sari van Veenendaal ganó el Guante de Oro, que la reconoce como la mejor en su posición.