Tim Howard fue uno de los protagonistas en el pasado Mundial de Brasil. A pesar de que su selección cayó eliminada en octavos de final ante Bélgica, el portero estadounidense dejó imñagenes para el recuerdo y el récord de ser el que más veces ha parado en un partido mundialista de la historia. Ahora son varios equipos los que le pretenden, pero él, en tono de broma, tiene un deseo muy especial: jugar en los New York Knicks.
De hecho, Howard, que nació en North Brunswick, a unos 30 kilómetros del Madison Square Garden, ha demostrado sobradamente que sabe manejar las manos, aunque deberá perfeccionar el tiro a canasta si quiere ser compañero de Carmelo Anthony y del español José Antonio Calderón.