El Levante UD afronta un mercado de invierno en el que va a tener que acertar en todos los movimientos que haga puesto que se encuentra en una situación crítica: último clasificado de la Liga BBVA a seis puntos de los puestos de salvación es decir, a dos victorias que son las que se han sumado en los 18 partidos del campeonato. Un período de fichajes en los que Manolo Salvador y Quico Catalán han protagonizado grandes aciertos, en el que han traído futbolistas que han sumado al grupo y otros que no estuvieron para nada afortunados durante su paso por el conjunto azulgrana.
El referente, el mínimo común denominador, debería ser al menos lo conseguido el año pasado cuando se fichó a Kalu Uche, que fue fundamental con sus cinco goles formando una gran pareja de ataque con David Barral y también la buena aportación de Víctor Casadesús; Iván Ramis, que hizo buenas actuaciones aunque luego perdió importancia; y José Mari, un centrocampista que fue con diferencia el que menos participación tuvo aunque luego con Lucas Alcaraz ganó en protagonismo en el inicio de la 2015-16. Es lo mínimo, ya que esos jugadores llegaron en el mercado de enero de 2015 a una plantilla más compensada que la de ahora y que además había sumado cinco puntos más, pues contaban con 16 en la decimoctava jornada.
Echando la vista atrás en el tiempo, el primer refuerzo de invierno en llegar en la nueva era fue un jugador que precisamente no pasará a la historia del Levante como Felipe Manoel. Los azulgrana no tenían mucho dinero en sus arcas y llegó el brasileño cedido del Villarreal y su papel fue testimonial. Al año siguiente, en 2010, regresó un emblema de la casa como Juanfran García. Además, del Hércules vino Rafa Jordá que, aunque no le quitó la titularidad a Javi Guerra, hizo cinco goles a cual más importante para el ascenso a Primera.
Uche, Casadesús, Simao o David Navarro (estos últimos fuera de plazo) son algunos de los aciertos y Botelho o Wellington, ejemplos de fracaso
Ya en 2011, el primer año en la máxima categoría desde el regreso, aterrizaron Wellington Silva y Jefferson Montero. El brasileño, una de las grandes pifias de esta saga, llegó comparándose con Ronaldo Nazario pero apenas tuvo relevancia, mientras que el interior ecuatoriano sí que jugó un papel aunque no protagonista. A la temporada siguiente, en 2012, se produjo uno de los buenos movimientos de Manolo Salvador aunque, exactamente, llegó en febrero: David Navarro, que firmó por media temporada para después ampliar su contrato. Además, llegaron otros tres futbolistas: Ghezzal, Serrano y Pedro Botelho. Ninguno de ellos fue de campanillas pero, curiosamente, Ghezzal marcó dos de los tres goles que metieron al Levante en Europa frente al Athletic (3-0) en esa histórica 2011-12. Serrano, ya de capa caída, no cuajó mientras que lo más destacado que dejó Botelho fue escaparse de la concentración en Madrid tras jugar en el Santiago Bernabéu.
En 2013 se produjo otro movimiento interesante en el mercado de invierno: Loukas Vyntra. Internacional con la selección de Grecia, rápidamente se hizo con un sitio en el once por su versatilidad (lateral y central), contundencia y veteranía. También llegaron Valdo, que no se acercó ni de lejos a su versión de 2010-11, y Acquafresca, un delantero centro que no se acopló al estilo Levante. Ya fuera del período invernal llegó Simao Mate, que fue entrando y saliendo del once pero cuando ha cogido verdadera importancia fue en la segunda mitad de la pasada temporada y ahora es fundamental en los esquemas del Levante.
Finalmente, 2014 fue la de cal y la de arena para el Levante con dos llegadas más a largo plazo que de rendimiento inmediato. En el último suspiro se incorporaron a la plantilla azulgrana Momo Sissoko y Víctor Casadesús. En cuanto al delantero mallorquín, le costó adaptarse y además tuvo algunas expulsiones que mermaron al equipo pero en 2014-15 fue de los jugadores más importantes del equipo aunque en el actual ejercicio no ha encontrado la regularidad. Por su parte, el Malí nunca dio el rendimiento que se esperaba de un futbolista de su nombre.